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Los médicos vascos cobran 1.231 euros brutos más al mes que los andaluces

Las guardias en los centros de salud se retribuyen a 16,85 euros la hora mientras que la media española asciende a 22,84

Concentración de médicos en un centro de salud de Sevilla / Foto: Manuel Olmedo
Concentración de médicos en un centro de salud de Sevilla / Foto: Manuel Olmedolarazon

Las guardias en los centros de salud se retribuyen a 16,85 euros la hora mientras que la media española asciende a 22,84

El estudio que acaba de publicar la Organización Médica Colegial de España (OMC) revela que las diferencias en los sueldos de los médicos de atención primaria, en función de la comunidad autónoma donde trabajen, «se mantuvieron e incluso en algunos casos se incrementaron» en 2018. Andalucía no sale muy bien parada en la mayoría de los registros, lo que da soporte a las denuncias que vienen planteando los facultativos del Servicio Andaluz de Salud (SAS) sobre la «discriminación» que padecen en materia retributiva. Y para muestra un botón: los médicos vascos cobran 1.231 euros brutos más al mes que los andaluces. En concreto, según el informe, los facultativos andaluces cobran 2.452 euros brutos al mes, frente a los 3.808 euros que perciben los del País Vasco. Son los profesionales que el estudio denomina «tipo 1», los que se sitúan en el escalafón más bajo de la carrera profesional. Son los que inician su actividad como interinos eventuales o sustitutos, tienen reconocido un trienio, sin carrera profesional retribuida y sin dedicación exclusiva al servicio de salud. Este sueldo de los médicos andaluces está por debajo de la media española, que se sitúa en los 3.342 euros. En cuanto a la retribución neta en esta misma categoría profesional, se sitúa en los 1.940 euros al mes, una cantidad muy inferior a la media nacional: 2.449 euros.

Si tenemos en cuenta el cómputo anual, los médicos andaluces son los que menos cobran de España. La retribución neta ascendió a 25.651 euros –frente a los 32.460 euros de media– y la bruta a 33.804 –frente a los 43.956 euros de media–. A medida que un médico avanza en la carrera profesional van aumentando las retribuciones, aunque las cantidades siguen estando por debajo de la media nacional. El estudio especifica las condiciones de un facultativo «tipo 4», que se sitúa en lo más alto del escalafón. Está en la etapa final de su actividad profesional, con 55 años o más de edad, es propietario de la plaza y tiene reconocidos diez trienios. Al mes tiene una retribución neta de 3.379 euros –frente a los 3.539 de media– y un sueldo bruto de 4.813 –frente a los 4.970 de media–. En cuanto al cómputo anual, se sitúa en los 44.290 euros netos –frente a los 46.642 de media– y en los 62.820 brutos –frente a los 65.276 de media–.

Mención aparte merecen las guardias. Los médicos andaluces son, igualmente, los que menos cobran por hora que dedican a este servicio en la atención primaria. En concreto, perciben 16,85 euros brutos por hora durante los días laborables, frente a los 27,63 euros que cobran los médicos de Murcia. La media española se sitúa en los 22,84 euros. En los festivos la cantidad asciende a 18,85 euros brutos por hora, una cantidad sólo superada por Ceuta y Melilla. La media en España alcanza los 24,95 euros. Si tenemos en cuenta las retribuciones netas, los facultativos de la comunidad autónoma también se sitúan en la parte más baja del ranking, con 9,66 euros por hora durante los días laborales y 10,80 euros los festivos. La media en estos casos llega a los 13,22 euros y 14,42.

Una década de crisis

La pérdida del poder adquisitivo a causa de la crisis es una realidad que también queda reflejada en el estudio. Desde el año 2009 a 2018 los médicos andaluces han perdido, sin guardias, 6.586 euros, es decir, un 19,5 por ciento de su masa salarial. Una década de recortes que se ha manifestado en la economía de los facultativos de toda España, por lo que no es un problema exclusivo de Andalucía. Hablamos de los médicos «tipo 1», aunque si analizamos a los profesionales que están en lo más alto del escalafón la cifra alcanza los 13.556 euros perdidos. Si le añadimos las guardias, la cifra alcanza los 10.345 euros perdidos en los profesionales «tipo 1» y los 15.917 en los que engrosan el «tipo 4».

Ante este panorama, la OMC asegura que el sistema público de salud mantiene una calidad asistencial aceptable, pese a los recortes en las plantillas y en los servicios, «a costa de un tremendo sobreesfuerzo de sus profesionales, y muy especialmente de los médicos, que están llegando al límite y diciendo ‘basta ya’ de forma muy clara».

Con todo, en el pacto que suscribieron PP y Ciudadanos para gobernar en Andalucía ambas formaciones políticas se comprometen a «propiciar la equiparación salarial de los profesionales sanitarios y docentes de la comunidad autónoma respecto a la media nacional». Añaden además que «la labor de nuestros servidores públicos, que cada día garantizan la prestación de los servicios públicos esenciales de calidad, merece un reconocimiento y una retribución justa y adecuada a la responsabilidad de sus funciones».

Una reforma integral

A la luz de los datos del estudio de la Organización Médica Colegial de España (OMC), la vocalía de atención primaria reclama una reforma «integral» de este ámbito para hacer frente a retos inminentes, como el envejecimiento y la cronicidad. «Ahora, y de forma urgente, hay que aplicar medidas de choque para superar el tremendo deterioro en el que se encuentra» el primer escalafón asistencial. En concreto, el colectivo exige, a nivel presupuestario, que la inversión en la atención primaria llegue al 20 por ciento del presupuesto sanitario «y avanzar después hasta el 25 por ciento». Igualmente, denuncia que los cupos de pacientes de los facultativos «están masificados», por lo que pide un refuerzo de las plantillas. También plantea aumentar el tiempo medio de atención a los pacientes hasta los diez minutos. «Hasta ahora se puede dedicar muy poco a investigación, docencia y formación». A juicio de la organización, la atención primaria soporta «graves problemas» que están afectando negativamente a los médicos de familia y pediatras.