Huelva

Los Perla huyeron con dos pistolas, dos escopetas y ocho kilos de oro

Nueve detenidos del clan en un piso de Calahonda, en Mijas, y otro en Hinojos (Huelva)

Los detenidos fueron trasladados a la Jefatura de Blas Infante y los controles continúan en las Tres Mil
Los detenidos fueron trasladados a la Jefatura de Blas Infante y los controles continúan en las Tres Millarazon

SEVILLa- Una decena de detenidos del clan de la Perla, dos pistolas y dos escopetas intervenidas, 150.000 euros en metálico y ocho kilogramos de oro, que en el mercado equivalen a más de 265.000 euros. Nueve de los implicados en la muerte de la menor de siete años, Encarnación S. S., en la medianoche del pasado miércoles fueron localizados en un piso de Calahonda, en Mijas (Málaga); y un décimo en Hinojos (Huelva). Según informaron fuentes del Cuerpo Nacional, se les imputa un delito de homicidio y tenencia ilícita de armas. Una de las personas detenidas en Mijas quedó libre para poder ocuparse de los hijos de la familia. Los arrestados serán trasladados al juzgado de Instrucción número 20 de Sevilla, que ha decretado el secreto de sumario, dentro del plazo máximo legal de 72 horas.

Los investigadores de la Brigada de Homicidios analizan si las armas utilizadas se corresponden con las utilizadas en el tiroteo en las Tres Mil Viviendas de Sevilla entre los clanes de los Perla y Los Marianos. De las decenas de casquillos localizados, parte corresponde a munición militar, informaron fuentes policiales a este diario.

Las detenciones se realizaron al filo de la medianoche de ayer. En la operación intervinieron agentes de la Policía Judicial de Sevilla en colaboración con la de Málaga. Los detenidos fueron trasladados a la Jefatura Superior de la Policía en Andalucía Occidental a lo largo de la jornada. La muerte de la menor en el tiroteo habría sido consecuencia de los disparos «descontrolados» de seis o siete miembros del clan de Los Perla, que atacaron al de los Marianos, al parecer, en busca de uno de sus miembros por un ajuste por un tema de drogas y un secuestro exprés por el que era buscado y se encuentra a la espera de juicio. En el tiroteo también resultaron heridos los padres de la menor, que fueron dados de alta el jueves y pudieron acudir al entierro de su hija. Los investigadores mantienen la tesis de que «la familia de la niña fallecida no tenía nada que ver en ello», por lo que los autores de los disparos «se habrían equivocado de casa».

Los agentes encargados del caso tenían identificados a los autores de los disparos desde la madrugada del martes pero hasta esta medianoche no pudieron localizar el enclave donde se ocultaban.

Tras el suceso, el clan de la Perla huyó de Sevilla y abandonó sus pisos en las Tres Mil Viviendas, que fueron asaltados. El Juzgado de Guardia de Sevilla dejó ayer libres con cargos a tres personas acusadas de intento de robo en los pisos de los Perla. Fuentes judiciales informaron a Efe de que el Juzgado de Instrucción 6, en funciones de guardia, dejó libres al mediodía de ayer a dos mujeres del clan de Los Marianos y a un adolescente del de Los Casianos, acusados de intentar robar en la vivienda de uno de los presuntos autores del tiroteo mortal. Los acusados negaron el intento de robo y aseguraron que fueron detenidos por la Policía cuando casualmente pasaban por delante del domicilio. También manifestaron que desconocían quién vivía en ese piso. El juez les ha imputado un delito de robo en tentativa y les dejó libres con la obligación de personarse en el juzgado los días 1 y 15 de cada mes. Otras dos detenidas, menores de edad, quedaron a disposición de la Fiscalía de Menores.

La subdelegada del Gobierno, Felisa Panadero, señaló que la investigación continúa. El alcalde, Juan Ignacio Zoido, indicó que la detención de los implicados «es el mejor ejemplo de que todo funciona como debe funcionar».

El dispositivo de seguridad se mantiene en las Tres Mil Viviendas. Colectivos como Nosotros También Somos Sevilla lamentan que «dentro de una semana» la inseguridad retome a las calles del barrio. Por su parte, el Sindicato Unificado de la Policía (SUP) denunció «falta de medidas de protección» para los agentes que trabajan en la zona, que tienen que «costearse sus propios chalecos antibalas». La Consejería de Justicia en Interior aseguró que existe «una dotación suficiente» para los agentes del Grupo de Intervención Operativa (GIO) de la Policía Nacional adscrita a la Junta en las Tres Mil Viviendas.