Política

Sevilla

Tenso arranque del curso político

Increpada en su reaparición por un colectivo de regantes, Díaz ve cómo la acción del Gobierno de Sánchez no es por ahora la ayuda esperada: inmigración, empleo, fomento...

Efectivos de la Guardia Civil contienen a un grupo de regantes del Condado que increpan a la presidenta de la Junta, Susana Díaz, en su visita institucional a San Juan del Puerto (Fotos: Efe)
Efectivos de la Guardia Civil contienen a un grupo de regantes del Condado que increpan a la presidenta de la Junta, Susana Díaz, en su visita institucional a San Juan del Puerto (Fotos: Efe)larazon

Increpada en su reaparición por un colectivo de regantes, Díaz ve cómo la acción del Gobierno de Sánchez no es por ahora la ayuda esperada: inmigración, empleo, fomento...

El nuevo curso político arranca en un clima de tensión. La presidenta de la Junta de Andalucía, Susana Díaz, reactivó ayer su agenda institucional con una visita a San Juan del Puerto (Huelva) donde fue increpada por regantes que la aguardaban de uñas, pese al anuncio realizado días atrás por el colectivo de posponer las movilizaciones previstas para las dos próximas semanas a la espera de ratificar el compromiso de la Confederación Hidrográfica del Guadalquivir de darles una solución definitiva a la falta de agua.

En ese ambiente enrarecido, la presidenta fue combatiendo otros frentes abiertos en la actualidad de la comunidad. Conflictos en los que por ahora, después de tres meses de convergencia política, no está recibiendo el apoyo esperado por parte del Gobierno de Pedro Sánchez. De las palabras a los hecho siempre va más de un trecho.

En la cuestión migratoria, que tan de lleno afecta a Andalucía, los vaivenes del Gobierno central están multiplicando la polémica. Susana Díaz ha optado por desviar la atención y responsabilizar al Partido Popular. Todo ello sin cumplir con todas sus competencias en lo que respecta a la protección de los inmigrantes. De hecho, ayer mismo Antonio Maíllo, de Izquierda Unida, le recordaba que es una obligación de la comunidad dotar de los recursos necesarios a los centros de menores que hay en Andalucía, «con la prioridad de que los menores no tienen nacional y que hay que atenderlos».

Díaz advierte de que el problema de la inmigración es «responsabilidad de todos», es decir, de las distintas administraciones y también de las comunidades autónomas. Así, insistió en que la postura del PP es demagógica porque durante la etapa de Zoido como ministro ya se avisó de que llegarían una 30.000 personas a la costa andaluza este verano. Todo ello sin reconocer los bandazos de Pedro Sánchez, de cuyas promesas aún no hay noticias en empleo o en infraestructuras.

El Gobierno andaluz, por lo demás, arranca el curso con muchas dudas. La primera: desvelar si habrá o no elecciones anticipadas. La negociación con Cs, cada día más distante, por los presupuestos puede activar el detonador, mientras los partidos de izquierda piden a Díaz que defina si su política irá en la misma dirección del PSOE estatal, próximo a Podemos, u optará por mantener la estrategia de los tres últimos años con Ciudadanos.

El efecto «boomerang» de la autopista entre Cádiz y Sevilla

Dirigentes del PSOE de Cádiz y Sevilla reclamaron a Mariano Rajoy sin éxito durante los últimos años de forma recurrente el fin del peaje de la autopista entre ambas capitales (no sucedió lo mismo en la era Zapatero). La foto que ayer se hicieron los populares Juanma Moreno, Antonio Sanz y Virginia Pérez en Jerez demuestra lo volátil que es la política actual. La estrategia socialista ha tenido un efecto «boomerang» tres meses después de la llegada de Pedro Sánchez a la Moncloa y demostrarse que no todo es voluntad política y que el PSOE buscaba la confrontación. Ayer, el líder de los populares se comprometió a eliminar el peaje «de forma inmediata cuando sea presidente de la Junta». Díaz criticó la «amnesia» del PP y desde el PSOE-A recriminaron la «desvergüenza» mostrada.