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Linares

Un «gobierno corporativo» sin socialistas en Linares

El alcalde, expulsado del PSOE, logra apoyos de PP y ediles no adscritos

El alcalde Juan Fernández
El alcalde Juan Fernándezlarazon

El Ayuntamiento de Linares contará con un «gobierno corporativo» lo que resta de mandato después de que el alcalde, Juan Fernández, haya encontrado apoyo en buena parte de la oposición para desarrollar la gestión una vez que fue expulsado del PSOE y los concejales socialistas renunciaron a sus competencias en el equipo de gobierno.

Fernández ha explicado que, junto a Joaquín Robles, también ex socialista y ahora no adscrito como él, cuenta con el respaldo del PP (seis ediles), Cilus (uno) y otros cuatro ediles no adscritos (Antonio Martínez y Francisco Javier Tortosa, procedentes del PP, y Felipe Padilla y Juana Cruz, de IU).

El restante edil no adscrito, Sebastián Martínez (ex de Izquierda Unida) «no quiere ninguna responsabilidad». Por su parte, el grupo de IU, que tiene un representante, «no secunda» esta nueva fórmula y los dos de Ciudadanos «están a la espera», entre otras cosas, de su dirección regional, «no por convicción de los concejales de aquí, que quieren estar en este consorcio para poner la ciudad por delante de cualquier otro objetivo».

«Hay muchos términos para definir esta nueva mecánica que surge por necesidad. Pero es cierto que podemos convertir un problema en una oportunidad con una fórmula nueva de gobernanza», explica el alcalde. Y es que, tras «la irresponsable deserción» de los socialistas, «había que reaccionar y solucionar esta crisis política», algo que se va a conseguir «entre prácticamente todos» los corporativos.

Al hilo, subraya que se trata de «ir todos a una poniendo la ciudad por delante y aparcando un poco siglas para que el interés general sea el que prime por intereses partidarios y partidistas». Esta implicación se podrá traducir en varias formas de asumir gestión, ya sea en concejalías o con la presidencia de comisiones informativas, sobre las que ha señalado, éstas últimas, que «es donde se elabora el orden del día» y se analizan los temas municipales.

La estructura definitiva del nuevo gobierno local de Linares se definirá en un pleno extraordinario que se prevé celebrar «a principios de la próxima semana». Entonces, será cuando «se solvente la crisis política», ya que «administrativa no hay» al funcionar «por sí mismo» el aparato administrativo del Ayuntamiento.

NORMALIZACIÓN

Para el alcalde no es una situación agradable, si bien «ha sido liberadora de la hipocresía, el sectarismo y cinismo del PSOE» y de unas «malas compañías» que lo han «defraudado». «Pretendían dejarme aislado y ha sido lo contrario», afirma Fernández, para el que «las organizaciones políticas deben regenerarse, revitalizarse y hacer progresar la democracia» con cuestiones como «listas abiertas, mayor ejercicio de transparencia, hacer realmente lo que se dice o actuar de verdad en aras del interés general y no de forma partidista».

CORPORACIÓN FRAGMENTADA

La Corporación Local de Linares está formada por 25 concejales. Tras la expulsión del alcalde y Robles del PSOE, éste cuenta con ocho, aunque debe sustituir a Carmen Domínguez, que dejó el acta al no sentirse identificada con las acciones de su partido tras la expulsión de Fernández.

El PP tiene seis representantes y Ciudadanos posee dos, mientras que IU y el partido independiente Cilus, uno en cada caso. La Corporación se completa con siete concejales no adscritos, ya que el regidor y Robles se suman a los cinco que había hasta ahora (dos procedentes del PP y tres de IU).