Solidaridad

Una nave de solidaridad con destino a la infancia

El programa de la startup sevillana Nabumbu reparte 3.000 juguetes para niños desfavorecidos estas navidades

Bu, «encargado» de almacén y «mascota» de Nabumbu, originó la campaña «La Nave de Bu»
Bu, «encargado» de almacén y «mascota» de Nabumbu, originó la campaña «La Nave de Bu»larazon

El programa de la startup sevillana Nabumbu reparte 3.000 juguetes para niños desfavorecidos estas navidades

Las pasadas navidades, Bu se encontraba en su nave preparando los regalos. Entonces, cayó en la cuenta de que muchos niños no tienen la suerte de que el cariño se transforme en regalos físicos. Los expertos señalan que, como las fábulas, los juguetes son básicos para el desarrollo del ser humano. Se aprende y se crece jugando. Ningún niño merece que le arrebaten los juegos y, con ellos, la infancia. Bu transformó la tristeza inicial frente a la realidad en un sueño de esperanza y se marcó el objetivo de repartir todos los juguetes posibles. Así se puso en marcha «La Nave de Bu», una campaña solidaria de la startup sevillana Nabumbu. Bu, para los no iniciados, es, por así decirlo –y sin que se ofenda, que es muy sentido–, «el robot que atiende en el almacen» y la mascota de Nabumbu, una juguetera nacida del tesón de un grupo de emprendedores que mezcla el periodismo y la experiencia en las redes sociales con los conceptos más tradicionales de las tiendas de toda la vida, la juguetería 2.0. A través de la campaña solidaria de «La Nave de Bu» se han donado 3.000 juguetes a distintas ONG: Remar, que además de España, tiene alcance a 70 países; Asociación Vecinal Manoteras (de Madrid), que colabora en la celebración de la carrera solidaria «Otra San Silvestre es posible»; y Oleum Arte (de Alcalá de Guadaíra), que por Navidad también ha prestado atención a los pequeños.

En la Navidad de 2015, Nabumbu realizó la donación a Cruz Roja, Aldeas Infantiles y Remar. Este año, «la nave» sufrió un leve retraso «y llegamos tarde, ya tenían los juguetes suficientes y desde Aldeas Infantiles nos comentaron muy contentos que como el año pasado les habían concedido el premio Princesa de Asturias de la Concordia, fue una gran publicidad que hizo que tanto empresas como particulares se volcaran, así que que ya tenían todo el material que necesitaban», señaló Amparo Baca, una de las conductoras de «La Nave de Bu». Este ejercicio, Remar se ha encargado del reparto de la mayor parte de los juguete y la Asociación Vecinal Manoteras y Oleum Arte se han ocupado de un reparto más local.

«La Nave de Bu» arrancó la Navidad de 2015 con la intención de mantenerse todo el año, «pero por falta de tiempo no hemos podido realizar más acciones solidarias». El objetivo es que este ejercicio el programa solidario esté en marcha «todo el año para atender distintas causas» y «dar protagonismo cada mes a una enfermedad rara, para que no sólo podamos hacer alguna aportación económica, sino también dar visibilidad a la enfermedad». A través de Bu, Nabumbu quiere concienciar a niños y adultos. «Hemos tenido que trabajar duro para conseguir todas las colaboraciones, pero ya nos hemos asegurado una buena cantidad de juguetes para todos esos niños que los necesitan», indicó Javier Padilla, responsable de Nabumbu.com, que destacó «la solidaridad de empresas como Cife o Glop Games y de Grupo Dictum». La campaña de «La Nave de Bu» consiguió un premio a la Mejor Campaña e-commerce en The e-Awards 2016. Y todo surgió «porque a Bu se le ocurrió una pillería». «Quería guardar un juguete de cada tres que se movieran en el almacén, de forma que no se notara mucho y destinarlos a los niños necesitados». En el almacén se percataron, pero en Nabumbu se hizo la vista gorda. Donde más se nota es en la felicidad y el desarrollo de los niños.