Palencia

Armisén pide un Gobierno estable para dar luz verde a la Estrategia Nacional frente a la despoblación

La presidenta de la Diputación de Palencia solicita un plan global que tenga en cuenta las características y fortalezas del mundo rural

La presidenta de la Diputación de Palencia, Ángeles Armisén, durante durante el encuentro con los participantes en uno de los talleres programados en el II Workshop Arquitectura Tradicional e Identidad Local
La presidenta de la Diputación de Palencia, Ángeles Armisén, durante durante el encuentro con los participantes en uno de los talleres programados en el II Workshop Arquitectura Tradicional e Identidad Locallarazon

Acabar con la «incertidumbre y la inacción» motivadas por la falta de un Gobierno estable en España para poner en marcha la Estrategia Nacional frente al Reto Demográfico. Esa es la petición que elevó la presidenta de la Diputación de Palencia, Ángeles Armisén, durante su participación en la segunda edición del Workshop Arquitectura Tradicional e Identidad Local celebrado en Paredes de Nava.

Así se pronunció durante su discurso, en el que subrayó la necesidad de que se aplique una estrategia global, con medidas concretas «que atiendan las particularidades del medio rural».

La presidenta de la Diputación contrapuso la «visión derrotista y de trazo grueso» que en ocasiones se impone en la que se hace referencia a los pueblos como «un mundo muerto» con la experiencia de la institución provincial y los ayuntamientos «que saben que la vida de los pueblos existe durante los 365 días del año, que no se extinguen y agonizan».

En este sentido reivindicó el trabajo de las entidades locales que trabajan «todos los días» para los habitantes de los pequeños municipios, para prestar los servicios municipales básicos y para atender otras necesidades e inquietudes de los ciudadanos, «sin olvidar las redes de comunicaciones y tecnología del siglo XXI, la cultura, el ocio y la participación social».

«No vamos negar el evidente problema de pérdida demográfica, un fenómeno que padecemos desde hace varias décadas en el interior de España y para el que no hay recetas mágicas»,dijo, por lo que instó a trabajar «codo con codo» las administraciones con la sociedad civil para tratar de frenar la pérdida de población y revertir esta tendencia con políticas adecuadas y transversales, e impedir que la recesión demográfica genere ciudadanos de primera y de segunda.

Frente a la expresión de «despoblación», Armisén prefirió calificarlo de «reto demográfico» puesto que la primera «se queda limitada», mientras que la segunda «abarca otros fenómenos que vivimos hoy en día».

«El reto demográfico nos sitúa ante un desafío y una tarea que engloba no solo la pérdida de población» sino también «el envejecimiento, los desequilibrios demográficos, la crisis migratoria, o la población flotante -aquellas personas no inscritas oficialmente en el censo de población pero que residen en ella-», aseveró.

La presidenta de la Diputación palentina se refirió a la pérdida de la población de la provincia y citó el informe publicado por la consultora Stratego, que analizó la evolución poblacional entre 2000 y 2018, y revelaba el «vaciamiento» de una parte de España «que está lejos de frenarse», y que hace que sea un problema «nacional» que exige una «acción decidida y un liderazgo real desde el Gobierno Central en los diferentes ministerios», sentenció.

Ángeles Armisén se preguntó, además, si el futuro del medio rural y la estabilidad de su población «no dependerá en último término de que los pueblos no pierdan su esencia, rasgos distintivos y su peculiaridad rural, amenazada por el actual mundo globalizado». Es por ello que afirmó que si la despoblación y el envejecimiento son «problemas rurales», requieren planteamientos y soluciones rurales que pongan en valor el rico patrimonio con el que cuentan.