Castilla y León

Carnero destaca la honestidad y el apego a la tierra como señas de la cultura del vino

El presidente de la Diputación de Valladolid entrega el premio de la Fundación UEMC a los hermanos Pérez Pascuas

Los hermanos Benjamín y Manuel Pérez Pascuas, reciben de manos del presidente de la Diputación de Valladolid, Jesús Julio Carnero, el Premio a toda una vida dedicada al mundo del vio, de la Fundación UEMC, durante la clausura del curso «El vino y la cocina» en Peñafiel
Los hermanos Benjamín y Manuel Pérez Pascuas, reciben de manos del presidente de la Diputación de Valladolid, Jesús Julio Carnero, el Premio a toda una vida dedicada al mundo del vio, de la Fundación UEMC, durante la clausura del curso «El vino y la cocina» en Peñafiellarazon

El presidente de la Diputación de Valladolid, Jesús Julio Carnero, destacó la pasión, la honestidad, la calidad y el apego a la tierra como señas de identidad de la cultura del vino.

Carnero, que participó en la clausura del curso de verano «Vino y cocina» de la Fundación de la Universidad Europea Miguel de Cervantes (UEMC) de Valladolid en el municipio de Peñafiel, fue el encargado de entregar el premio a toda una vida dedicada a los caldos a los hermanos Pérez Pascuas.

De ellos, señaló que lo más importante es que «tanto el abuelo Mauro, que inició la saga, como luego Adolfo, Manuel y Benjamín, y ahora sus hijos, siguen la tradición y han potenciado algo tan importante como el trabajo continuo en el viñedo y la bodega en familia».

Fueron Benjamín y Manuel los que, también en representación de Adolfo, recogieron el reconocimiento y argumentaron que «lo que intentamos es producir desde Pedrosa de Duero un vino honesto con valentía». «Lo percibimos con humildad pero con el orgullo de que, con otros bodegueros, hemos contribuido a que el vino de esta tierra sea conocido en todo el mundo», señalaron.

Asimismo, Carnero afirmó que en el acto se dieron cita «la flor y nata» de la producción de caldos de calidad en la Comunidad. «El vino es un elemento mágico que nos hace ser mejores, el aflorar en cada uno lo bueno que se lleva dentro», aseveró.

El reconocimiento a toda una vida dedicada al vino lo otorgan con sus votos representantes de los consejos reguladores de las denominaciones de origen, periodistas especializados y miembros de la Fundación y la UEMC.

Recae esta vez en una familia que se embarcó en 1980 en la aventura de fundar su propia bodega y cuya motivación se centró en la elaboración de vinos de calidad. En las pasadas ediciones se premió al enólogo Mariano García, de bodegas Mauro, y al consejero delegado de Bodegas Vega Sicilia, Pablo Álvarez, y reconoce a los grandes impulsores del vino en Castilla y León.