Política

Castilla y León

Clemente pone el Estatuto como ejemplo de «buen hacer» frente al independentismo catalán

La presidenta de las Cortes destaca que «hubo discrepancias pero siempre dentro de la legalidad»

La presidenta de las Cortes, Silvia Clemente, junto el director del colegio Claret de Segovia, Juan José Raya
La presidenta de las Cortes, Silvia Clemente, junto el director del colegio Claret de Segovia, Juan José Rayalarazon

La presidenta de las Cortes de Castilla y León, Silvia Clemente, destacó la diferencia entre lo que ocurre en Cataluña con el proceso de construcción de Castilla y León, «un buen ejemplo» de «cómo se puede discrepar» dentro de la legalidad. En este sentido señaló que, a las puertas del juicio del Procés, hay que dejar claro que los políticos independentistas «cometieron un delito porque no dieron opiniones, sino que rompieron la legalidad», con la aprobación de leyes «en contra la Constitución» y «a sabiendas» de lo que hacían.

Clemente presentó, en el Colegio segoviano Claret, el libro «Segovia en la construcción de Castilla y León», en un acto en el que hizo un paralelismo entre los hechos ocurridos hasta la aprobación del Estatuto de Autonomía de la Comunidad con los pasos dados por el desafío independentista catalán.

Para la presidenta de las Cortes lo que está pasando en Cataluña «no está dentro del marco de Derecho» y ésta es «la diferencia sustancial» que se observa con respecto al proceso de construcción de la autonomía de Castilla y León, frente a cómo una Comunidad Autónoma que quiere romper el Estado «por la fuerza» y «fuera de la legalidad».

Clemente subrayó que el libro era necesario porque es «bueno» tener recopilada esta parte de la historia de la Comunidad, con «un manual» donde «tener recogido todo lo que había ocurrido», buscando los documentos sueltos o en libros editados que recogían «retazos de esta historia».

«Conocer la historia», argumentó, «te hace ser más consciente de la fortaleza del Estatuto de Autonomía de Castilla y León», y su especial la fortaleza que reside en que todo el recorrido realizado se hizo dentro del marco de la legalidad.

Finalmente, aseguró que «lejos de lo que muchos creen», la historia para aprobar nuestro Estatuto «no fue fácil» como demuestra el hecho de haber sido la última Comunidad en hacerlo por las «vicisitudes» que se dieron, hasta 1983, con las cuestiones planteadas por León, Burgos y Segovia.