Cuenta atrás para el proyecto Meseta Sport de la Diputación de Valladolid

Cuenta atrás para el proyecto Meseta Sport que la Diputación de Valladolid pondrá en marcha en Villavieja del Cerro, junto a Tordesillas. Hace unos días, el Boletín Oficial del Estado sometía a Información Pública, el proyecto básico, de ejecución y de actividad, así como el Estudio de Impacto Ambiental. Una parte necesaria, según indica el vicepresidente de la institución vallisoletana, Víctor Alonso, a LA RAZÓN, «para que los ciudadanos puedan hacer las alegaciones pertinentes». Y si todo va bien, el proceso de contratación para las obras finales, que tendrían una estimación de cuatro meses, arrancarían a finales de este año y el parque tematizado podría abrir sus puertas el próximo año.

Ahora, se deberá adecuar las instalaciones y edificaciones existentes, fallidas del anterior proyecto Meseta Sky, cancelado por orden judicial, con el objeto de desarrollar actividades de aventura y ocio tanto para la actividad familiar, escolar y turística.

Esquí, educación ambiental, ciclismo, parapente, paintball y airsoft, el karting pedal y eléctrico, escalada, tirolina, jumping, camas elásticas, globos aerostáticos o un circuito BMX convivirán en este paraje para disfrute de los visitantes.

Víctor Alonso confía en las posibilidades de este proyecto para atraer a un buen número de personas al centro. Cifra en 40.000 las personas que estima pueden acercarse anualmente a disfrutar de las instalaciones, en una zona donde la Diputación de Valladolid, hasta la fecha, no había levantado ningún recurso turístico. «Además», resalta Alonso, se encuentra en un «nudo estratégico», junto a la A-6, tránsito obligado para aquellos que vayan hacia Galicia o hacia Madrid.

Para este año, la institución ha estimado una inversión de 800.000 euros para rematar las obras del complejo.

Práctica de esquí

Pese a que las instalaciones de Meseta Sport, la principal actuación será el esquí, especialmente para aquellos que deseen iniciarse en la práctica de este deporte. Para ello, habrá dos pistas de hielo sintético, una para principiantes de 25x25 metros y otra de 165x25 con una pendiente del 14 por ciento y con remonte. «Son unas pistas similares a las que existen en las estaciones de esquí», indica el vicepresidente de la Diputación.

Pero la oferta de ocio permanente apuesta también por la educación medioambiental. Para ello se van a crear zonas verdes, con la plantación de árboles, además de lugares de descanso, paseo y protección visual de todo el complejo, para dar un soporte de sombra y diversidad paisajística.

Vinculado a la práctica deportiva, se construirán circuitos accesibles para bicicleta de montaña; un rocódromo para la escalada de iniciación y para adultos, además de diversos trazados para realizar senderismo.

Para los niños, numerosas iniciativas que van desde tirolinas de 30 y 50 metros, al jumping (camas elásticas), dos toboganes gigantes y un área recreativa para distintos juegos, donde no faltarán los columpios, además de juegos interactivos.

Y para adolescentes y jóvenes, tres escenarios para la práctica del paintball y airsoft y un campo de globos aerostáticos.

No faltarán edificios, para albergue y cafetería y restaurante, y un servicio para el equipamiento y una zona de acceso para aparcamiento para 104 coches y seis autobuses.