Valladolid

El PP de Valladolid pide un plan industrial y comercial para reactivar la economía

Inciden en retomar el soterramiento en la ciudad

El portavoz del Grupo Municipal del PP de Valladolid, José Antonio Martínez Bermejo, junto a Mercedes Cantalapiedra
El portavoz del Grupo Municipal del PP de Valladolid, José Antonio Martínez Bermejo, junto a Mercedes Cantalapiedralarazonfreemarker.core.DefaultToExpression$EmptyStringAndSequenceAndHash@6360e840

El Grupo Popular en el Ayuntamiento de Valladolid, a través de su portavoz, José Antonio Martínez Bermejo, ha propuesto que el Ayuntamiento adopte medidas urgentes que permitan que la ciudad recupere la actividad y el pulso económico que se ha perdido «tal y como se detecta en distintos indicadores que se van conociendo».

Los populares consideran que es imprescindible que el equipo de gobierno municipal adopte una serie de medidas urgentes en un plazo de tres meses que ayuden a que la ciudad recupere el dinamismo económico y las empresas puedan generar más riqueza y empleo que permita que los jóvenes se queden a trabajar en la ciudad en lugar de marcharse. Es por ello que reclaman la puesta en marcha de un Plan municipal de Apoyo a la Industria tecnológica y a la Innovación con el apoyo de la Universidad de Valladolid y los centros tecnológicos implantados en la ciudad.

También se reclama un plan municipal de apoyo a la modernización del Comercio, así como a favorecer la transmisión de los negocios abiertos cuyo titular se jubile. Además, se piden medidas de apoyo a los nuevos profesionales autónomos, favoreciendo parte de sus costes de implantación, así como ayudas a aquellos que creen empleo.

Por último, inciden en retomar el proyecto de soterramiento como fórmula de reactivar las inversiones en Valladolid y consideran que existen malos indicadores económicos y de empleo y que «están indicando a gritos a los responsables municipales la necesidad de tomar medidas urgentes» y que sólo están interesados en los conciertos internacionales o de Operación Triunfo o en quitar el nombre religioso a las fiestas de la ciudad.