El proyecto «Territorio Rural Inteligente» apurará el uso de servicios de los pueblos

El proyecto «Territorio Rural Inteligente» del Gobierno Autonómico apurará el uso de servicios en los pueblos con el apoyo de las diputaciones, que trabajarán para rentabilizar el agua, la luz y la recogida de residuos.

Juntas desarrollarán la iniciativa, que en una primera fase se centrará en la creación de una plataforma de sensores para conocer cómo funcionan estos recursos públicos.

Para ese objetivo, el Consejo de Gobierno aprobó un expediente de gasto de 750.000 euros, aportados por la Consejería de Fomento, y el resto, hasta los 1.115.500 euros, será consignado por las diputaciones para desplegar una iniciativa en dos fases, con un periodo de desarrollo entre tres y cinco años.

La consejera de Agricultura y Ganadería y portavoz de la Junta, Milagros Marcos, explicó que se trata de optimizar recursos, ver la evolución de los servicios y dar respuesta en el caso de que se den incidencias o haya consumos excesivos, por ejemplo, en el caso del alumbrado público.

En el primer tramo de actuación, se desplegará la plataforma software con un número limitado de sensores y actuadores por control remoto instalados en puntos que determinará la Consejería de Fomento y Medio Ambiente y que servirá como periodo de prueba para comprobar su correcto funcionamiento; en la segunda, que durará tres años, las diputaciones instalarán y mantendrán los sensores que controlarán estos servicios.

Serán las instituciones provinciales las que financien la adquisición, instalación y mantenimiento de los sensores.

Patrimonio natural

Por otro lado, la Junta comunicó también la inclusión de tres hayedos de Castilla y León a la lista de Patrimonio Mundial Natural de la Unesco.

Son los de Cuesta Fría y Canal de Asotín, ambos en Picos de Europa (León) y el de Riofrío de Riaza (Segovia).

Marcos celebró esta importante noticia para la Comunidad y recordó el patrimonio regional que cuenta con este reconocimiento, como Atapuerca, Las Médulas o el Camino de Santiago.

De esta manera, Castilla y León cuenta con once bienes declarados por la Unesco, nueve como patrimonio cultural y natural y dos como inmaterial.