Fallece a los 72 años el obispo de Zamora, Gregorio Martínez Sacristán

Hondo pesar en la Iglesia española, en general, y entre los católicos zamoranos, en particular. Y es que a las doce y media del mediodía de este viernes fallecía a los 72 años de edad el obispo de Zamora, Gregorio Martínez Sacristán, según ha confirmado la Diócesis de Zamora a través de la Conferencia Episcopal Española. Al parecer, su estado de salud en las últimas semanas era “delicado.”

La capilla ardiente se instalará el domingo en la iglesia de San Andrés del Seminario de San Atilano y estará abierta de once de la mañana a once de la noche para que los fieles zamoranos puedan despedir a su obispo”.

El presidente de la Conferencia Episcopal Española, el cardenal y arzobispo de Valladolid Ricardo Blázquez, presidirá el lunes en la catedral de Zamora la misa de funeral . La misa exequial se celebrará a las doce de la mañana del lunes en la Catedral de Zamora y será concelebrada por obispos de diferentes diócesis del país. Además, el lunes se rezará un responso “por su eterno descanso” a las once y media de la mañana en la iglesia de San Ildefonso de la capital zamorana.

Tras el funeral del lunes, los restos mortales de Gregorio Martínez Sacristán recibirán sepultura en la Catedral de Zamora.

Martínez Sacristán, nacido en Villarejo de Salvanés (Madrid), se formó en el Seminario Mayor de Madrid y fue ordenado sacerdote el 20 de mayo de 1971. Ha sido obispo de Zamora en los últimos trece años.

Se licenció en Teología, con especialización en Catequética por el Instituto Católico de París, donde cursó estudios de 1974 a 1976. Su ministerio sacerdotal ha estado vinculado a la Diócesis de Madrid y la parroquia del pueblo madrileño de Colmenar de Oreja fue su primer destino. Martínez Sacristán fue también director del Instituto de Teología a distancia entre los años 1988 y 1995, colaborador en la parroquia de San Vicente Ferrer de 1983 a 2002 y miembro y relator del III Sínodo diocesano de Madrid durante 2005.

El 15 de diciembre de 2006 fue nombrado Obispo de Zamora y tomó posesión de la diócesis el 4 de febrero de 2007, consagrado por Antonio María Rouco Varela y sustituyendo al frente de la diócesis a Casimiro López. Hasta 35 obispos de España y Portugal presenciaron el acontecimiento.