Las unidades veterinarias no cerrarán para ahorrar

Los ganaderos están inquietos ante los rumores de cierres de unidades veterinarias, como medida para ahorrar gastos y hacer frente al déficit público. Pero desde la Junta de Castilla y León insisten en que no tienen pensado cerrar ninguna de las unidades existentes a lo largo y ancho de la Comunidad. Aunque lo único que sí están estudiando es la posibilidad de adaptar los horarios y los días de atención al ganadero en función de las necesidades de cada municipio o zona de la Comunidad para abaratar costes y agilizar los procesos.

Por este motivo, y para evitar malos entendidos, el secretario general de la Consejeía de Agricultura y Ganadería, Juan Zapatero, iniciaba ayer en Palencia una ronda de contactos con alcaldes de municipios afectados y representes de organizaciones agrarias que llevará por toda la Comunidad en los próximos días, para explicarles los entresijos de algunas modificaciones que se están estudiando para hacer más eficaces las 103 unidades veterinarias existentes en Castilla y León.

Unidades todas ellas muy dispares, muy dispares aunque con una estructura similar, y que en algunos lugares se atiende a 43 ganaderos y en otras se prestan servicios a hasta 1.800. «Por este motivo, debemos pensar en reordenar el sistema actual, anque siempre desde la perspectiva de prestar un mejor servicio y de que los beneficiarios tengan la seguridad de que cuando acudan demandando algo habrá una persona adecuada que les atienda», señala Juan Zapatero, mientras tranquiliza al ganadero al asegurar que cada vez que éste se desplace a una unidad veterinaria encontrará una respuesta eficaz a la gestión que le llevará hasta allí. En cualquier caso, Zapatero reconoce que el proceso está abierto a cualquier sugerencia o aportación de los implicados puesto que no hay ninguna decisión tomada.

En la reunión de ayer con varios ganaderos y los alcaldes de Astudillo, Paredes de Nava, Carrión de los Condes y Herrera de Pisuerga, el regidor de este último municipio palentino, Javier San Millán, que hizo de portavoz de todos, agradeció las buenas intenciones de la Junta en todo este asunto, pero recordó la necesidad de que, a pesar de que estemos en tiempos complicados, el dinero del campo se destine al desarrollo del medio rural. «Los productos que se producen en el mundo agrícola de esta Comunidad generan valor añadido y sería bueno no solo no cerrar estas undades veterinarias, sino potenciar la investigación, el desarrollo y la innovación en ellas», finalizó.