Los pueblos de Valladolid se benefician de las cuentas más sociales de la Diputación

Con los votos a favor del PP y de Ciudadanos -el PSOE se abstenía y Valladolid Toma la Palabra y Valladolid Sí se puede votaban en contra- , la Diputación de Valladolid ha sacado adelante los presupuestos de 2018. Los más sociales en años, que superan los 106 millones de euros con un único objetivo: mejorar la calidad de vida en los pueblos de la provincia.

El presidente de la institución provincial, Jesús Julio Carnero, se mostraba satisfecho por la aprobación de estas cuentas y agradecía las enmiendas y aportaciones de los grupos al texto, que han servido, decía, para enriquecer el texto final y dar un impulso a la creación de empleo y bienestar en el medio rural vallisoletano.

De hecho, el Pleno de la Diputación Provincial, celebrado ayer, daba luz verde a 31 de las 73 enmiendas defendidas por los grupos. Veintiocho, por parte de Ciudadanos, que han supuesto incrementar en dos millones de euros los presupuestos para, entre otras cosas, dar a los ayuntamientos mayor libertad de gasto o luchar contra la despoblación. Además, el Pleno aprobaba dos enmiendas del PSOE, que han supuesto el incremento de las cuentas en un millón de euros para el módulo de inversión destinado a los Consistorios dentro de la convocatoria de los Planes Provinciales.

Finalmente, salía adelante una enmienda del grupo Valladolid Sí se Puede, por valor de 40.000 euros, que servirán para ayudas dirigidas a las familias monoparentales. «Este presupuesto aprobado -decía Carnero- demuestra el valor de la Diputación como instrumento esencial de mejora de la calidad de vida de los habitantes del medio rural».

Igualmente, en la sesión plenaria se aprobaba también con 24 votos a favor y tres abstenciones de los diputados de Toma la Palabra y Si se Puede, la convocatoria de audiencia a los ayuntamientos de la provincia para la formación de los Planes Provinciales de Cooperación del bienio 2018-2019. Algo que salía adelante al incorporarse una enmienda del PP para incrementar el presupuesto inicial que ha pasado de 9 a 10 millones de euros.

Por otra parte, el Pleno comenzaba con un minuto de silencio en memoria de las víctimas de violencia machista y la lectura de una declaración institucional que reafirma el compromiso de la institución que preside Jesús Julio Carnero en la erradicación de los malos tratos hacia las mujeres. Un manifiesto en el que, entre otras cuestiones, se expone que la violencia de género es una grave violación de los derechos humanos de las mujeres y de sus hijos y otras personas dependientes a su cargo, que tiene su causa directa en la desigualdad estructural entre mujeres y hombres fruto de las relaciones de poder, dominio y de posesión que han ejercido históricamente aquellos sobre éstas, debido a una sociedad patriarcal, asentada sobre la idea de la superioridad del hombre.