Palacio Real

Los vecinos de El Real Sitio de San Ildefonso recuerdan «con mucho cariño» a su paisano Don Juan de Borbón

La Razón
La RazónLa Razón

Segovia- Cien años después de su nacimiento en el palacio de La Granja (Segovia), los vecinos del Real Sitio recuerdan con cariño a quien fue su paisano, don Juan de Borbón, y algunas anécdotas que acompañaron a su alumbramiento, como la salva de 21 cañonazos que acabó con los cristales de varias ventanas.

Horas antes de que se celebre un acto en recuerdo del Conde de Barcelona, esta tarde, Teresa López Ocón, nieta del que fuera ingeniero de telégrafos Luis Ocón Alonso-Barroeta, habla del trabajo de su abuelo, quien transmitió la noticia del nacimiento al Gobierno de España, en Madrid, la Villa y Corte.

Pese a que se había concluido la línea del telégrafo, el 8 de marzo de 1857, relata López Ocón a Efe, en base a información recogida de la familia, más de medio siglo después, la transmisión sólo era posible bien entrado el día, cuando los hilos calentados se dilataban, y si había suerte.

El Rey Alfonso XIII pidió tener en La Granja al mejor ingeniero de telégrafos, para mantener contacto con el Gobierno, aunque era un muchacho de 19 años, Luis Ocón, que finalmente hizo posible la comunicación, pasadas la una y media de la madrugada del 20 de junio de 1913, tras el parto de la Reina Victoria Eugenia.

Con un operario subido a un poste con sendos alicates, para mantener los hilos unidos, el joven ingeniero sujetaba con los pies los bornes en una batería y transmitía a la vez en código morse la novedad, que fue conocida en la Villa al amanecer de ese viernes.

Teresa López Ocón, que regenta en La Granja un comercio de cristal, una de las tradiciones del Real Sitio, se muestra orgullosa cuando explica que, al conocer la acción y decisión de su abuelo, el Rey tuvo a bien concederle la Gran Cruz de Isabel la Católica.