Hospitales

Matesanz aplaude el récord de Castilla y León en donaciones y destaca su ejemplo

El director de la Organización de Trasplantes anima a conservar el sistema

Rafael Matesanz, inaugura en Valladolid el Curso sobre donación y trasplantes para residentes especialistas en Medicina Intensiva junto a Sáez Aguado y José Cuñat
Rafael Matesanz, inaugura en Valladolid el Curso sobre donación y trasplantes para residentes especialistas en Medicina Intensiva junto a Sáez Aguado y José Cuñatlarazon

Al término de 2012, España se mantiene como líder mundial en donaciones y trasplantes, con una media de 34,8 donantes por cada millón de habitantes.

Sin embargo, Castilla y León ha batido el pasado año todos su récords, al alcanzar 130 donantes de órganos, un 21,9 por ciento más que en 2011, lo que significa una media de 51,1 donantes por cada millón de habitantes. Una intensa y fructífera actividad que ha permitido llevar a cabo casi 400 extracciones de órganos y un total de 283 trasplantes. Para el director de la Organización Nacional de Trasplantes, Rafael Matesanz, Castilla y León es un ejemplo, y señala que el secreto de este éxito se basa en un sistema sanitario asentado, en el que hay coordinación entre todos los hospitales, y en unos profesionales entrenados y preparados, pero, sobre todo, motivados. Matesanz destaca que en los últimos veinte años Castilla y León ha multiplicado por cinco sus donantes y eso se debe no solo a la solidaridad y generosidad del castellano y leonés -ya que además han descendido las negativas familiares-, sino especialmente al buen funcionamiento de la Sanidad pública en esta Comunidad.

Rafael Matesanz destaca también la buena organización existente así como el seguimiento exhaustivo que se hace al paciente y a la provisión pública de medicamentos el hecho de que un estudio realizado hace tres años en EEUU revelara que la supervivencia en enfermos y órganos trasplantados sea veinte veces superior en España que en EEUU. De cara al futuro, y con la crisis actual, Matesanz tiene claro que el objetivo pasa por mantener y conservar el sistema actual de donaciones y trasplantes para que el paciente obtenga el órgano que necesita. Y es que, pese a la solidez del sistema español, Matesanz no esconde su preocupación por los desastres que la crisis está provocando en los sistemas de trasplantes de otros países como Portugal o Grecia que estaban funcionando.

Por su parte, el consejero de Sanidad, Antonio María Sáez Aguado, destaca que el éxito de este sistema demuestra que en momentos de recortes y ajustes para garantizar la Sanidad pública, «lo esencial se mantiene y además con calidad». Para el consejero el camino emprendido hace más de veinte años por la Organización Nacional de Trasplantes, en el que se da más capacidad, protagonismo y autonomía a los profesionales, es el que hay que seguir y es en el que la Junta de Castilla y León ha puesto sus miras de cara al futuro.