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Castilla y León

Predicen una desaceleración de la economía castellano y leonesa durante el próximo año

Institutos y Bancos estiman que el crecimiento podría no superar el 2,6 por ciento del PIB

La Razón
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La economía castellano y leonesa sufrirá un pequeño parón durante el próximo año. Seguirá creciendo, así que en eso no habría que alarmarse, pero lo hará en menor medida que este año que termina, donde las previsiones de la Junta apuntan a un crecimiento del 2,7 por ciento del Producto Interior Bruto (PIB).

Así lo creen la mayor parte de institutos y Bancos que elaboran informes, desde donde apuntan un crecimiento de la economía regional que oscilará entre el 1,8 que predice Hispalink, la que peores augurios da a nuestra Comunidad, y el 2,6, tan solo una décima menos de crecimiento que este año, por la que apuesta BBVA Research, según datos facilitados por Ical.

Décimas de diferencia que no son cualquier cosa puesto que cada uno de ellos son 600 millones de euros. Como mencionaba anteriormente, las estimaciones más optimistas son las de BBVA Research, que considera que 2018, cerrará con un aumento del PIB del 2,2 por ciento, mientras que en 2019, la producción aumentará un 2,6. Más moderada es la estimación de Unicaja Banco para 2019, que se sitúa en el 2,4 por ciento, un porcentaje cinco décimas por debajo de la previsión de cierre para la Comunidad este ejercicio del 2,9 por ciento. Ceprede es el organismo más pesimista en cuanto a cómo cerrará el año que se acaba en Castilla y León, donde calcula que la economía apenas avanzará un dos por ciento y augura un crecimiento del 2,1 por ciento.

Y Funcas, por su parte, reduce la previsión de crecimiento económico el año que viene, hasta el dos por ciento. Aunque todos estos datos, como bien recordaba la propia consejera de Economía y Hacienda de la Junta, Pilar del Olmo, están cogidos como suele decirse por alfileres, ya que dependen de muchos factores y situaciones. Que la salida del Reino Unido de la Europa de la Unión sea más dura o más banda, que las políticas arancelarias de Donald Trump se mantengan e impulsen o den un paso atrás o que el Gobierno socialista de España persista en su inestabilidad política, económica y también social, derivada de la crisis catalana principalmente, afectará de una manera positiva o negativa al crecimiento de la economía regional. Y todo ello, en un año para el que no hay Presupuestos del Estado y tampoco hay Cuentas regionales, aunque sí que se han prorrogado los presupuestos de 2018 que, según Del Olmo, garantizarán servicios públicos y compromisos adquiridos como la rebaja de las tasas universitarias y la subida de los sueldos de los funcionarios.

La caída demografía también se acusa

La despoblación es el problema más grave que sufre Castilla y León. Y no solo porque la Región sse esté quedando vacía, que también, sino además por la baja densidad, dispersión e inexistencia de de centros de tracción económica. «Esto provoca que Castilla y León sea menos atractiva para las inversiones, sobre todo extranjeras, en detrimento de otros territorios», señala a Ical el catedrático de Economía Aplicada, José María Calzada.