Castilla y León

UGT y CC OO claman en la calle por las personas y sus derechos laborales

Aseguran que es hora de negociar y de repartir los frutos de la recuperación entre los ciudadanos

Manifestación pasada por agua en Valladolid, en la que se apoyó a los trabajadores de Sada
Manifestación pasada por agua en Valladolid, en la que se apoyó a los trabajadores de Sadalarazon

«Es tiempo de negociar». Esto es lo que pedían ayer los sindicatos mayoritarios a Mariano Rajoy, en las distintas movilizaciones que convocaban en las principales capitales de la Comunidad.

«Es tiempo de negociar». Esto es lo que pedían ayer los sindicatos mayoritarios a Mariano Rajoy, en las distintas movilizaciones que convocaban en las principales capitales de la Comunidad.

Alrededor de dos mil personas, pertenecientes a las centrales sindicales CCOO y UGT se echaban a las calles para recordarle al presidente del Gobierno de España que lo primero son las personas y sus derechos y reclamarle que es la hora de repartir entre los ciudadanos los frutos del crecimiento económico.

Los líderes de ambos sindicatos en Castilla y León, Ángel Hernández y Faustino Temprano, encabezaban la concentración que recorría las calles y plazas de Valladolid, la más numerosa de cuantas se celebraban a lo largo y ancho de la Región, que contaba también con el apoyo del líder de IU y procurador, José Sarrión.

Una protesta en la que demandaban al dirigente popular que abra un proceso de negociación dentro del Diálogo Social «serio y riguroso, con un calendario, objetivos y presupuestos». «Si no quieren dialogar ni negociar con nosotros que lo digan», señalaba Hernández, mientras explicaba que el Gobierno debe negociar con sindicatos y patronal las cuestiones que afecten a estos sectores para luego llevar lo acordado al parlamento para que puedan ser mejoradas las medidas.

Al respecto, el líder de CCOO lamentaba que Rajoy dijera que se abría un tiempo de negociación, les convocase a un encuentro y no llevara ningún calendario ni objetivos. «El Diálogo Social no es ir a tomar café, hacerse una foto y hasta luego», advertía, mientras recordaba que horas después de esa reunión, el presidente presentó un acuerdo cerrado con el PSOE sobre el alza del Salario Mínimo Interprofesional. Pese a todas estas proclamas, Hernández aseguraba que no están amenazando a nadie, ni van contra nadie, «ya que lo que reclamamos es una negociación primero entre el Ejecutivo y el diálogo social y luego con el Parlamento».

Faustino Temprano anunciaba, por su parte, que las manifestaciones de ayer abren un calendario de protestas sostenidas en el tiempo que compaginarán con un proceso de concertación «siempre y cuando quiera el Ejecutivo». Los dirigentes sindicales apuntaba que entre los objetivos de sus movilizaciones se encuentran conseguir que se derogue la reforma laboral, impulsar el empleo de calidad, reforzar los servicios sociales y acabar con la ley mordaza. Reformar la atención a la dependencia y cerrar un pacto educativo, son otros de los retos que se han marcado en UGT y CCOO para los próximos meses de trabajo.

El SMI, un avance insuficiente

Respecto a la negociación entre populares y socialistas en la que acordaban el aumento del salario Mínimo Interprofesional, los sindicatos reconocían que ha supuesto un gran avance, si bien, apuntaban también que la propuesta sindical «era más ambiciosa» para que ese salario mínimo interprofesional llegara a los ochocientos euros en 2017 y estuviera en torno a los mil al final de la legislatura.

«Es hora de recuperar a las personas y dar respuesta a las necesidades de los trabajadores», finalizaban los dirigentes sindicalistas.