Política

Elecciones municipales

Ada Colau, obligada a rehacer su núclero duro a menos de cuatro meses de las municipales

Gerardo Pisarello, Laia Ortiz y Josep Maria Montaner no repetirán en una lista que debe votarse en marzo

Ada Colau junto a gerardo Pisarello y Laia ortiz en un acto de la anterior campaña, en 2015
Ada Colau junto a gerardo Pisarello y Laia ortiz en un acto de la anterior campaña, en 2015larazon

Gerardo Pisarello, Laia Ortiz y Josep Maria Montaner no repetirán en una lista que debe votarse en marzo.

Ada Colau afronta la «batalla por Barcelona» sin varios miembros de su núcleo duro, bajas de un «pinyol» por el que apostó la alcadesa cuando llegó por sorpresa al Ayuntamiento. Gerardo Pisarello, su mano derecha en el equipo municipal, será la cara visible de los «comunes» en los comicios europeos; Laia Ortiz (la cuota de Iniciativa, con una dilatada experiencia) ha anunciado que se retira de la política; Josep Maria Montaner (dirigente en una consejería tan importante para Barcelona en Comú como es la de Vivienda) tampoco repetirá para no alargarse más de un mandato; mientras que Gala Pin (concejal en el distrito más difícil de la ciudad, Ciutat Vella, y persona muy cercana a Colau) duda y aún debe dar una respuesta.

A este goteo de casos hay que sumarle el «factor Xavier Domènech»: el dirigente se retiró en diciembre y volvió a su vida como profesor universitario tras renunciar a todos sus cargos. Candidato en los comicios generales en Cataluña, se especula con el nombre de Jaume Asens en el caso de que hubiera elecciones anticipadas al Congreso. De momento, todo apunta a que Asens repetirá en la lista de Barcelona en Comú. El dirigente, abogado de profesión, es uno de los hombres de la más absoluta confianza de Ada Colau ya desde su época de activista, tercer teniente de alcalde y con buenas relaciones en Podemos.

Además, hay que tener en cuenta que Xavier Domènech entró hace cuatro años como comisionado de Estudios Estratégicos y Programas de Memoria del propio Ayuntamiento de la mano de la alcaldesa.

Colau, por tanto, tiene deberes pendientes a pocas semanas de la precampaña para las municipales más reñidas que se recuerdan en la capital catalana. El primero, el de su «número dos», ya lo ha solventado: la ex activista ha recurrido a Joan Subirats, comisionado de Cultura y uno de los grandes ideólogos de Guanyem, para hacer tándem con él en su próxima lista. Un movimiento calcudado para volver a sus esencias y reivindicar la transversalidad y el pluralismo que los «comunes» reivindican en un guiño claramente electoral.

Los demás aún están pendientes de sustituir o resolver. Desde Barcelona en Comú explican que la alcaldesa se está reuniendo estos días con activistas de la plataforma municipalista (no personas independientes) para «escuchar» y recibir sugerencias acerca de temas, perfiles o incluso nombres a incorporar. Reuniones discretas en sedes de distritos o locales de barrio para confeccionar una lista de corte personalista que deberá presentar en las próximas semanas para que la militancia la apruebe a mediados de marzo.

Queda por ver también qué ocurrirá con Podemos: el partido ha renunciado a hacer primarias propias en la capital catalana para escoger qué candidato se integraría en la lista de Barcelona en Comú y ha optado por fiarlo todo al proceso que organice la plataforma municipalista del Colau. Un gesto que ha provocado alguna que otra mueca en el seno de la formación morada pese a contar con el aval explícito del Secretario de Organización, Pablo Echenique.