Barcelona

Bruselas advierte a Mas que no dará amparo a su proyecto soberanista

Mas, ayer, junto al presidente del Parlamento europeo, el alemán Martin Schulz, en el Palau de la Generalitat
Mas, ayer, junto al presidente del Parlamento europeo, el alemán Martin Schulz, en el Palau de la Generalitatlarazon

El viaje de Artur Mas hacia Ítaca no pasa por Bruselas. Así se lo advirtió ayer el presidente del Parlamento europeo, Martin Schulz, en una visita a Barcelona con varias paradas, entre ellas el Palau de la Generalitat. Schulz era perfectamente consciente de que iba a ser interrogado por el proceso soberanista puesto en marcha por el Govern de Mas y aunque trató de no ofender a ninguna de las partes, su mensaje no pudo ser más desesperanzador para los independentistas que buscan el amparo de Europa. «La UE no puede resolver el problema, no podemos encontrar una solución, se tiene que encontrar dentro de su propio país», afirmó.

Schulz se desplazó a Barcelona para pronunciar una conferencia y aprovechó su viaje para entrevistarse con Mas y también con su correligionario, el socialista Pere Navarro. Con ambos abordó la cuestión soberanista y en ambas ocasiones trató de medir sus palabras. «Diga lo que diga sobre esta cuestión la otra mitad del conflicto opinará que soy un hombre que está en contra de ellos, así que... ¿qué hago?», se preguntó tratando de no molestar a Mas.

Sin embargo, Schulz acabó por echar un jarro de agua fría al presidente de la Generalitat, empeñado en convertir las próximas europeas en un ensayo soberanista. «La tentación de utilizar Europa para otros objetivos que no sean los reales que son los de elegir diputados siempre es muy grande», lamentó el presidente del Europarlamento, quien aprovechó para subrayar que lo que está en juego es si los europeos desean una Unión en clave de mercado, o bien una Europa social o ecologista.

Navarro se apuntó un tanto en este sentido, pues fue el primer secretario del PSC quien quiso abordar el tema de las elecciones europeas y el intento de los soberanistas por transformar la cita en un ensayo de consulta. «De estas elecciones europeas no depende el soberanismo y las relaciones entre Cataluña y España, sino que depende el futuro de todos los europeos y europeas», sentenció.

Puestos a sonrojar a Mas, Navarro también intentó arrancar al alemán Schulz una defensa del proyecto federalista, pero el presidente de la Eurocámara evitó aconsejar este modelo de organización estatal a pesar de que lo consideró «muy interesante».

Finalmente, Schulz aseguró que no ha recibido presiones ni por parte catalana ni por parte española. «Soy una persona difícil de presionar. La única persona en este mundo capaz de presionarme es mi mujer», dijo en tono distendido.