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Colau evita el «procés» en su primera reunión oficial con Torra

La alcaldesa y el president centran el encuentro en la vivienda y la acogida de refugiados.

La alcaldesa de Barcelona, Ada Colau, y el presidente de la Generalitat, Quim Torra, ayer, antes de la reunión en el Palau.
La alcaldesa de Barcelona, Ada Colau, y el presidente de la Generalitat, Quim Torra, ayer, antes de la reunión en el Palau.larazon

La alcaldesa y el president centran el encuentro en la vivienda y la acogida de refugiados.

Nada ha erosionado más a Ada Colau que el «procés». A medida que la política catalana se ha ido polarizando, la alcaldesa de Barcelona ha ido constatando cómo la ambigüedad de sus posicionamientos le han ido dejando en tierra de nadie y, por ende, su figura y el partido que encabeza, los «comunes», han ido acusando un desgaste evidente que se ha reflejado en las encuestas y las urnas –como el desplome del 21-D–. Por ello, para rebajar la tensión y alejar el «procés» del debate, Colau ha intentado durante los últimos meses centrar su discurso en las cuestiones sociales. Algo que ayer refrendó en su primera reunión con el presidente de la Generalitat, Quim Torra, en la que abordó casi exclusivamente problemáticas como la vivienda, la acogida de refugiados o la seguridad, y consiguiendo esquivar .

Así lo confirmó en la rueda de prensa posterior, donde aseguró que habían pasado de puntillas por todo aquello relacionado con el proyecto rupturista y sus consecuencias –se limitó a decir que coincidía con Torra en pedir la libertad de los políticos presos y exigir que el Gobierno retire los recursos contra las leyes sociales– y afirmó que había acudido como alcaldesa de Barcelona para conversar sobre las necesidades de la ciudad. En este sentido, Colau puso énfasis en la emergencia habitacional –ayer también consiguió arrancar el apoyo de parte de la oposición para tramitar una ordenanza que oblique a los constructores a destinar el 30 por ciento de sus promociones a vivienda protegida–, y anunció que en julio acudirán ambos a la reunión del Consorcio de la Vivienda, participado en un 40 por ciento por el Ayuntamiento y un 60 por ciento por la Generalitat, pero que, en estos momentos, según Colau, es el consistorio quien aporta el 80 por ciento de los recursos ecónomicos para mitigar los problemas de vivienda en Barcelona. La portavoz del Govern, Elsa Artadi, sin embargo, aseguró después que la Generalitat también ha hecho «grandes esfuerzos» en la cuestión habitacional. Asimismo, Colau también pidió al Govern que frene la subasta de los pisos que hereda y los destine a vivienda social, y reclamó revisar el protocolo seguido para los desahucios para evitar nuevas situaciones como el suicidio de un hombre en Cornellà.

En relación con los refugiados, tanto Colau como Artadi coincidieron en la necesidad de que se celebre una cumbre en Cataluña para para escrutar los recursos disponibles para la atención de todas las personas que llegan. Finalmente, como tercer gran reto abordado, coincidieron en la necesidad de dotar de más agentes de Mossos d'Esquadra para este verano en Barcelona para combatir los narcopisos o los hurtos.

Asimismo, Colau exigió más financiación de la Generalitat para completa la L9 de Metro y el aumento de guarderías.