Colau pone 40 millones para desencallar la L10 del metro

La alcaldesa, Ada Colau, y el vicepresidente de la Generalitat, Oriol Junqueras, firmaron ayer un convenio para que el Ayuntamiento adelante 40 millones de euros con los que acabar dos estaciones de la L10 Sur del metro a su paso por la Zona Franca: Foneria y Foc Cisell. La Generalitat, a cambio, cederá al consistorio la titularidad de varios edificios y solares para hacer equipamientos y vivienda pública, como el edificio del Borsí, parte de las antiguas Cocheras de Borbón y algunos espacios de Can Batlló. La entrada en funcionamiento de las nuevas estaciones está prevista para principios de 2018.

Pese a que el metro circula por las vías soterradas del paseo de la Zona Franca para entrar y salir de las cocheras, ningún tren no se detiene aún en las estaciones previstas de la L10 Sur. En octubre de 2015, el Ayuntamiento explicó que estudiaría adelantar dinero para que el metro llegase a la Marina y ahora la inversión se ha concretado. Colau y Junqueras firmaron el mencionado convenio. Las estaciones ya están empezadas, tanto bajo tierra como en superficie. Por ejemplo, la futura estación de Foc Cisell (en el paseo de la Zona Franca entre las calles del Foc y del Cisell) ya tiene construidas las escaleras de entrada y el esqueleto del futuro ascensor. Al respecto, Colau aseguró que el gobierno municipal quiere evitar que «haya barrios de primera y barrios de segunda»; por lo que subrayó que las estaciones de los barrios de la Marina «eran las más prioritarias con diferencia». En este sentido, Oriol Junqueras afirmó que el trabajo conjunto entre las dos administraciones «da salida la reivindicación» de los vecinos, que «desde hacía tiempo reclamaban una buena conexión con el conjunto de la ciudad».

El gobierno de la Generalitat, por lo tanto, se compromete a devolver la inversión municipal en especias. Según el convenio, el gobierno catalán cederá el edificio del Borsí (en Ciutat Vella), varias naves y solares del recinto Can Batlló (en Sants-Montjuïc), y parte de las antiguas Cocheras de Borbón (en Nou Barris). En estos espacios -actualmente propiedad de la Generalitat- el Ayuntamiento hará equipamientos municipales y pisos para su inclusión en la bolsa de vivienda pública.

El gobierno municipal iniciará los próximos meses los procesos que han de determinar el estado actual de los inmuebles –con un valor de 40 millones– y trabajará con los distritos y las entidades vecinales para decidir qué usos se les da.

El concejal del PP en Barcelona Javier Mulleras criticó que Colau «siga financiando los parches de la Generalitat con Barcelona». «La Generalitat ha invertido 407 millones en los Ferrocarriles del Vallès, pero sigue castigando a Barcelona, ya que sólo destinará 44 millones a dos de las ocho estaciones que necesita la Zona Franca», que ascenderían a 170 millones.