Barcelona

Colau precinta el teatro Principal por funcionar como discoteca

El Ayuntamiento cierra también tres terrazas que acogían actividades musicales sin la licencia pertinente

El teatro Principal en la rambla de Santa Mònica
El teatro Principal en la rambla de Santa Mònicalarazon

El Ayuntamiento cierra también tres terrazas que acogían actividades musicales sin la licencia pertinente

El distrito de Ciutat Vella precintó el viernes noche la sala de teatro del Principal tras constatar que este espacio se estaba utilizando como discoteca cuando la licencia del establecimiento sólo autoriza su uso como teatro, según informó ayer el Ayuntamiento de Barcelona.

Además, en el marco de las actuaciones de precinto por actividades que no se ajustan a la lincencia que se llevaron a cabo en la noche del viernes en el distrito, también se precintaron los equipos de música de tres establecimientos del Front Marítim por no estar autorizados a acoger actividadad musical en los espacios exteriores.

Según la nota difundida por el Ayuntamiento barcelonés, el precinto de la sala de teatro del Principal, ubicado en La Rambla, se ha realizado por el incumplimiento de una orden previa de cese de actividades no autorizadas, ya que con anterioridad ya se había detectado que éste espacio desarrollaba actividades que no estaban contempladas en su licencia municipal. Así, en una inspección que tuvo lugar en la madrugada del pasado 18 de octubre, la Guardia Urbana constató que la sala del teatro seguía usándose como discoteca, con lo que acogía un espacio de baile, en ella se permetía el consumo de bebidas más allá del espacio delimitado del bar y superaba el límite de la 1.30 horas como hora de cierre, razón por la cual se ha procedido a su precinto.

Además, el distrito de Ciutat Vella también procedió el viernes noche al precinto de los equipos de música de las terrazas de los locales del Front Marítim Opium, Shoko y Pachá tras constatar que las licencias de los tres no les permitían actividad musical. De esta manera los tres establecimientos, que ya había recibido también con anterioridad una orden municipal de cese de esta actividad no autorizada, podrán mantener sus terrazas, para las que cuentan con licencia, pero no podrán reproducir música en ellas.