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Colegios públicos con «estelada» y doctrina política

La Razón
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Hasta hace un par de semanas, cuando los colegios cerraron sus puertas, todavía se podían ver colgadas en la ventana de una escuela del barrio de Gràcia, en Barcelona, algunas de las «esteladas» dibujadas y coloreadas por los alumnos de tercero de primaria. La imagen de una decena de hojas Din A4 convertidas en banderas independentistas, al principio sorprendió a algunos vecinos. Cuando el ministro de Educación, José Ignacio Wert, acusó a Cataluña de «adoctrinar» a los alumnos, incluso, hubo un vecino que, en un derroche de humor, le excusó alegando que los niños se habían limitado a copiar la «estelada» que tiene colgada en el balcón, frente a la escuela.

El debate de las controvertidas «esteladas», entre picasianas y mironianas, del colegio no había salido del barrio hasta ayer, que PP y Ciutadans lo llevaron al Parlament de Cataluña.

Ambos hicieron la misma pregunta a la consellera de Enseñanza, Irene Rigau, sobre la presencia de «estelades» en las fachadas e interiores de algunos colegios públicos, durante la sesión de control al Govern. La consellera negó inicialmente que haya escuelas con banderas independentistas ondeando. «Lo único que he visto colgado es el cartel que dice: "L'escola en català ara i sempre"». Pero la diputada del PP María José García Cuevas le enseñó una fotografía del CEIP El Frigolet de Porqueres (Girona), con una «estelada» plantada en el patio delantero, y el diputado de Ciutadans Albert Rivera le mostró dos imágenes más, una de la escuela de La Sínia de Vic (Barcelona) y otra de colegios de Navàs (Barcelona). Tras cantarle las cuarenta a la consellera, Rivera llegó a reprochar, en el turno de preguntas, al president de la Generalitat, Artur Mas, que «se está haciendo pedagogía contra el odio».

Por su parte, la diputada del PP reclamó a la consellera que intervenga para evitar la presencia de símbolos que «no son legales» en las escuelas, después de acusar al ejecutivo de Artur Mas de utilizar los colegios para «adoctrinar» políticamente a los niños. Denunció que esta «apología a la secesión» es «propia de regímenes totalitarios», a lo que Rigau respondió que «la cruzada del españolismo anunciada por el ministro Wert ha encontrado una comisaria en el Parlament».

Haciendo uso del refranero popular español, que dice que la mejor defensa es un buen ataque, la consellera reprochó al PP y a Ciutadans que con su cruzada contra el catalán han logrado hacer sentir mal, utilizando la lengua y la política como herramienta, a esos alumnos que han pedido una educación diferenciada en las aulas.

Al ver que la consellera hacía oídos sordos a intervenga su denuncia, la diputada del PP, acompañada del portavoz del partido, Enric Millo, entregó, por la tarde, a la delegada del Gobierno, Llanos de Luna, una carta para que intervenga en los colegios públicos donde ondean banderas independentistas, como ha hecho con otros edificios públicos. En la misiva adjuntan la fotografía de la escuela de Porqueras, tomada por la diputada, con la «estelada».