Estados Unidos

Dibujo catalán en Nueva York

Un dibujo de Torres-García, presente en Nueva York
Un dibujo de Torres-García, presente en Nueva Yorklarazon

Se abre la puerta de la mansión, de cinco plantas, donde se ubica la galería Leigh Morse Fine Arts, en el barrio del Upper East Side de Manhattan al lado del Museo Metropolitan. Elegida por el galerista Artur Ramon y su socia Marianne Elrick-Manley, muestra las propuestas de Ramon en la Feria de Dibujos Maestros de Nueva York hasta el 1 de febrero. El galerista espera en la quinta planta, a la que se llega en un lento y viejo ascensor con una puerta automática. En cada planta, parece haber una galería. Abajo un portero de uniforme, que parece guardar todos los secretos del edificio, ayuda a los compradores y curiosos que se han atrevido a desafiar los grados bajo cero que regala Nueva York estos días.

Casi es requisito indispensable hablar en voz baja mientras Ramon atiende a los posibles compradores. Ha traído una selección de unos treinta dibujos del siglo XVI al XXI, entre la que destaca «Oriental con turbante» de Andrea de Lione relacionada con el lienzo «Elefantes en el Circo» que forma parte de la colección del Museo del Prado; «Mercader de tapices» de Fortuny; «Ciclistas» de Casas; «Cuaderno de apuntes de Mallorca» de Joaquim Mir, que encontró un amigo de Ramon en un mercadillo; o dibujo de Torres-García, portada del libro «Poemes en ondes hertzianes» de Joan Salvat-Papasseit.

Al entrar en la galería, el ojo busca las piezas que ha traído de Canals después de que el año pasado vendiese un dibujo a la National Gallery de Washington. Sin duda hay un antes y un después de la obra catalana en Estados Unidos después de la exposición «Barcelona y Modernidad» en el Metropolitan de 2007, a la que Ramon contribuyó con el préstamo de algunas piezas.

«Este año hemos hecho una representación de arte español y catalán, cuyas piezas claves son la acuarela cubista de Juan Gris, que es una pieza para museo del año 1920. Y alrededor hemos puesto el antes y después. Antes con la Barcelona de 1900 con Casas y Picasso, Torres-García. Luego, Dalí, Torres-Gacía otra vez, pero más vanguardista. Hemos traído a Canals porque es muy buen dibujante y también como recordatorio de lo que pasó el año pasado. Y porque es un dibujo preparatorio de un cuadro muy importante que está en Cataluña», indica en referencia a la pieza expuesta «Tres bustos femeninos».

«El tipo de comprador es muy cosmopolita. Puede venir un coleccionista que se encapriche de una obra o un museo que quiere introducir una pieza por primera vez. Es muy variado porque nuestro enfoque es muy amplio», reconoce Artur Ramon sobre la gente que pasará por la galería estos días en Nueva York.

Atento, resuelve las dudas de todo el que le pregunta mientras desvela cómo es el proceso de compra. «Notas que hay algo. La pieza le empieza a atraer. Hay un elemento de imán. Se empieza a obsesionar, el cual termina en compra. Hay un elemento de caza. Aquí se es más decidido. Si le gusta, bien, y se ha acabado. Es más rápido y más fácil porque la relación con el dinero es diferente», analiza sobre las diferencias entre la adquisición en Nueva York y España.

Por eso afirma que «tal y como están las cosas en España, la única forma que tenemos los galeristas de sobrevivir es exportando como pasa en muchas otras empresas. No me quejo porque es el contexto en el que está el país. Nosotros hace diez años que empezamos con esta estrategia porque veíamos que el mercado se iba ralentizando», asegura Ramon.