Patrimonio

El Ateneu se queda el archivo del Pitarra

El Ayuntamiento de Barcelona negocia la conservación del legado artístico del mítico restaurante

Una imagen del interior del Restaurant Pitarra donde puede verse una parte de su fondo artístico acumulado a lo largo de 127 años de funcionamiento
Una imagen del interior del Restaurant Pitarra donde puede verse una parte de su fondo artístico acumulado a lo largo de 127 años de funcionamientolarazon

El Ayuntamiento de Barcelona negocia la conservación del legado artístico del mítico restaurante.

En 24 horas han cambiado varias cosas sobre el futuro del Restaurant Pitarra, un local emblemático e histórico de Barcelona que cerrará sus puertas para convertirse en un pub irlandés. El domingo parecía incierto el futuro de su patrimonio literario –especialmente vinculado a la figura y el tiempo de Frederic Soler, más conocido como Pitarra. A ello había que sumar un fondo artístico con piezas de varios creadores importantes, como Ràfols-Casamada, Cuixart o Subirachs.

Las diferentes presiones realizadas a lo largo del día de ayer han permitido concretar el destino final de estos materiales. Desde la nueva propiedad del Restaurant Pitarra se indicó ayer que el Ateneu Barcelonès sería el destino final del archivo literario mientras que el legado artístico e histórico podría tener el Museu d'Història de la Ciutat como depositario.

Por la tarde, el Ateneu Barcelonès confirmó a este diario que, en efecto, ellos serán los encargados de preservar la documentación del Pitarra. Se trata de un conjunto formado por primeras ediciones, manuscritos, cartas y dibujos de Pitarra. Desde el Ateneu se aseguró que se trata de una donación gratuita de los nuevos propietarios del restaurante de la calle Avinyó. El Archivo Pitarra, de esta manera, pasará a formar parte de la rica colección patrimonial y del fondo teatral que tiene el Ateneu Barcelonès. Igualmente, este centro de la calle Canuda se encargará del procesamiento, restauración y digitalización de todos los materiales que podrán ser consultados por los barceloneses.

Lo que no llegará al Ateneu serán la máscara mortuoria, ni el escritorio del dramaturgo. Esto podría ser para el objetivo del Ayuntamiento de Barcelona. Desde el consistorio se comunicó que fue ayer por la tarde cuando tuvieron conocimiento de que el Pitarra cuenta con nuevos propietarios que quieren realizar obras menores en el interior del local. «Ante esta nueva situación del inmueble, el consistorio ha acordado con la nueva propiedad una entrevista en los próximos días para conocer el proyecto exacto de obras que se quieren llevar a cabo», se dice en la nota. A ello hay que sumar que el Ayuntamiento buscará «la conservación del material y, en el caso que corresponda, tomará las medidas oportunas para garantizar su buena conservación de estos elementos en el marco que permite la normativa municipal». Igualmente el Museu d'Història de la Ciutat se ha puesto en contacto a nivel técnico para el patrimonio de este restaurante, el segundo más antiguo de Barcelona.