El Ayuntamiento pide a la Urbana que no baje la guardia ante el «top manta»

Dos episodios de agresiones de «manteros» a agentes de la Guardia Urbana de Barcelona, que quedaron heridos leves, hicieron reaccionar al Ayuntamiento, por lo que representantes municipales, con la concejala de Ciutat Vella, Gala Pin, a la cabeza, y sin la alcaldesa, Ada Colau se reunieron con cargos del cuerpo policial. Todo viene a raíz de la muerte de Mor Sylla en Salou. Era un vendedor ambulante que se lanzó por el balcón durante una operación de los Mossos d’Esquadra.

Las principales conclusiones fueron que se dijo a los agentes que actúen de forma proactiva, esto es, que no bajen la guardia en ningún momento. No obstante, fuentes del Ayuntamiento confirmaron que no se incrementarán, de momento, los efectivos dedicados a la vigilancia del «top manta». Además, la Guardia Urbana tendrá la obligación de informar de cualquier agresión, por leve que sea, y en las que el Consistorio se personará como acusación particular. No obstante, el principal sindicato del cuerpo, Sapol, no se mostró muy satisfecho con estas medidas, básicamente por no aumentar el número de agentes destinados a este asunto.

El asunto sigue siendo polémico, tanto en Barcelona como en Salou. En la turística localidad tarraconense, tres testigos de los hechos se ratificaron de sus primeras declaraciones, y aseguraron que no vieron contacto alguno entre la víctima y los Mossos. No obstante, el juez sigue tomando declaraciones y la investigación sigue su curso.

Por su parte, el líder del PP de Barcelona, Alberto Fernández, reclamó que Colau comparezca para explicar la política de seguridad municipal contra el «top manta». El edil popular lamentó que las explicaciones «las hace de forma tibia un comisionado o a través de una filtración sobre instrucciones del jefe de la Guardia Urbana» cuando quien debería darlas es Colau. «Una alcaldesa no puede estar solo en los platós de televisión», apuntó, y pidió que convoque más plenos y comisiones municipales para dar explicaciones.

El portavoz de CiU en el Ayuntamiento, Joaquim Forn, consideró que el gobierno municipal liderado por Colau genera un efecto llamada en el «top manta» al ser demasiado «permisivo». Pidió menos reuniones de análisis y más acción para que Barcelona no se convierta «en un gran bazar por la actitud contemplativa» del Consistorio. «Se ha llegado a esta situación porque se genera desconfianza», aseveró.