El juez eleva a 6,6 millones los desvíos del Palau a CDC

La sombra de la corrupción vuelve a planear sobre CDC, y además con la figura de Fèlix Millet otra vez por medio. El partido tiene su sede embargada y ayer llegó una nueva acusación del juez, que elevó a 6,6 millones la cifra que presuntamente se embolsó la formación de la constructora Ferrovial, en concepto de comisiones ilícitas a través del Palau de la Música. Hasta ahora, el magistrado instructor del caso, Josep Maria Pijuan, había fijado en 5,1 millones esta cantidad, pero la Fiscalía recurrió, al creer que era más.

El juez aceptó el recurso de la Fiscalía y también aceptó la cantidad calculada por el Ministerio Público, los citados 6,6 millones. De esta manera, los supuestos casos de corrupción vuelven a salpicar a CDC, pese a que en este caso únicamente hay dos imputados de la formación, el ex tesorero Daniel Osàcar y el ex diputado Jaume Camps. Pijuan considera que ambos pudieron tener un papel importante en el pago de las comisiones.

En su auto, el juez admite su error de cálculo y estima que CDC recibió en efectivo del Palau 3,7 millones, y no 2,3 como había cifrado cuando dio por concluida la investigación. Siempre según el magistrado, el cobro se realizó a través de Osàcar y de otro ex tesorero del partido, Carles Torrent, que falleció en 2005.

A los 3,7 millones se les tiene que sumar las cantidades desviadas mediante facturación falsa y en los convenios firmados con la fundación Catdem, cercana a CDC y que está siendo investigada por la Sindicatura de Cuentas, ya que presenta cuentas opacas de más de un millón de euros. La cantidad definitiva de los desvíos quedará fijada en el escrito de acusación de la Fiscalía y en el auto de apertura del juicio oral.

Otro golpe para CDC es que se desestima su recurso que presentó contra la responsabilidad civil que se le fijó por el supuesto desvío de fondos del Palau. En sus conclusiones, el juez determina que la «ambigüedad mostrada» por parte de las acusaciones particulares respecto a CDC como responsable civil «no obsta a su imputación como partícipe a título lucrativo, cuando menos en virtud de las sumas recibidas que habrían de ser objeto de comiso, en el supuesto de prosperar la imputación del delito de tráfico de influencias».

En su recurso, el partido alegó la «inexistencia de indicios» para fundamentar la responsabilidad civil.

En julio de este año el juez dio por concluida la investigación sobre el caso del Palau. Los Mossos d'Esquadra entraron a registrar la emblemática entidad en verano de 2009, cuatro años antes. Una de las conclusiones fue que el supuesto desvío del Palau hacia CDC, a través de Ferrovial, fue de 5,1 millones, a cambio de la adjudicación de obra pública. Consideró el magistrado que la empresa y el partido llegaron a aun acuerdo en 1998, y que se alargó durante más de diez años.

De esta manera, según el juez, Ferrovial camufló en sus donaciones al Palau lo que pudieron ser pagos ilícitos para salir con ventaja en las adjudicaciones de obras públicas. La constructora pagaba una comisión que suponía el 4 por ciento de cada proyecto.

De esta cantidad, un 2,5 por ciento presuntamente iba a parar a CDC, mientras que el 1,5 por ciento restante se lo repartían el propio Millet y su mano derecha en ese momento, el ex director administrativo del Palau, Jordi Montull.