Espionaje en Cataluña

El Parlament embosca a Camacho tras negarse a comparecer por el caso Método 3

Sánchez-Camacho, abandonando el hemicilo en una imagen de archivo
Sánchez-Camacho, abandonando el hemicilo en una imagen de archivolarazon

Hasta en tres ocasiones había informado Alicia Sánchez-Camacho de que no tenía la intención de comparecer hoy en la comisión de asuntos institucionales del Parlament para dar explicaciones por la trama de espionaje articulada en torno a Método 3. La presidenta del PP catalán –a quien habían citado CiU, ERC, ICV, C's y CUP– argumentó que el caso ya se ha cerrado a nivel judicial para justificar su ausencia, pero los servicios de protocolo del Parlament colocaron de todas maneras un cartel con su nombre en la mesa de comparecencias y así los fotógrafos pudieron captar la instantánea de una silla vacía. De esta guisa dio inicio una sesión dominada por las críticas de CiU, ERC, ICV, C's y CUP contra Sánchez-Camacho, sobre quien acabará pesando, probablemente, una reprobación de su actitud y una petición formal para que devuelva su acta de senadora (lo es por elección del Parlament).

Los populares reaccionaron airados contra lo que calificaron un «acoso político y un espectáculo mediático». El portavoz adjunto del PP, Santi Rodriguez, denunció al presidente de la comisión, Sergi Sabrià (ERC) por mentir. «Miente diciendo que no tenían respuesta del PP sobre la petición de comparecencia. Se lo hemos dicho por escrito a la presidenta del Parlament. Yo mismo lo dije en la reunión de la mesa de la comisión y también por correo electrónico al presidente de esta comisión que ahora dice no saber nada», explicó Rodríguez. Y concluyó: «Se demuestra que sabían que no comparecería y, pese a todo, han puesto el cartel en la mesa. Esto es ganas de organizar un espectáculo mediático, no voluntad por buscar una comparecencia».

Las protestas del dirigente del PP no movieron el guión del resto de grupos, que vertieron todo tipo de críticas contra Sánchez-Camacho y, en menor medida, contra el ex secretario de Organización del PSC, José Zaragoza, a quien también habían citado y quien tampoco compareció (en este caso sin enviar ninguna justificación por escrito a la comisión).

CiU e ICV plantearon que la Mesa del Parlament decida si se puede actuar legalmente contra la presidenta del PP catalán, a pesar de que el reglamento no prevé sanción de ningún tipo por negarse a una comparecencia. Sin embargo, nacionalistas y ecosocialistas apelaron a uno de los enunciados del Estatut que establece que los cargos públicos están obligados a comparecer ante el Parlament cuando éste lo solicita. ICV, además, presentó una propuesta de resolución con un doble objetivo: reprobar la actitud de Sánchez-Camacho y pedir que devuelva su acta de senadora. CiU se mostró de acuerdo con esto último.

Ciutadans, por su parte, anunció que pedirá de nuevo que se abra una comisión de investigación sobre el caso Método 3, la cual ya fue rechazada por CiU, ERC y PSC. Cabe recordar que la trama de espionaje político estalló después de que trascendiera el «pinchazo» de una conversación que mantuvieron Sánchez-Camacho y Victoria Álvarez –ex amante del primogénito de Jordi Pujol– en el restaurante La Camarga, cuyo encargó llegó a atribuirse a José Zaragoza.