Política

El desafío independentista

El «procés» separatista tensa el ambiente

Están creciendo los episodios de acoso, sobre todo los cometidos por independentistas

Están creciendo los episodios de acoso, sobre todo los cometidos por independentistas.

Cada vez parece más evidente que el «procés» independentista está tensando la situación en Cataluña, por ambas partes. Es sabido que en los últimos meses han habido pintadas en la casa de del juez Pablo Llarena, tensión por colocar o retirar lazos amarillos en espacios públicos, cortes de carreteras y peajes por parte de los Comités de Defensa de la República (CDR), protestas contra el Consejo de Ministros que se celebró en Barcelona en diciembre, y otros muchos altercados.

Pero hay tres episodios más. Por ejemplo, el diputado en el Parlament y candidato a la alcaldía del PP, Xavier García Albiol, denunció insultos hacia él cuando asistía a un espectáculo infantil acompañado de su hija de once años, en Barcelona.

«Quiero mostrar mi indignación con la agresividad de algunos independentistas que en un espectáculo infantil, y cuando voy acompañado de mi hija se dedican a insultarme hasta hacer llorar a mi hija», escribió en su cuenta de Twitter.

Informó que los hechos tuvieron lugar en el Palau Sant Jordi, donde se encontraba para ver una actuación del Cirque Du Soleil, y ocurrió en el momento en el que fue a comprar un algodón de azúcar para su hija. «Es lamentable que algunos separatistas no entiendan la diferencia entre lo público y lo privado, y más cuando vas con una niña de once años, que empiecen a chillar y a insultar como locos, es inadmisible», lamentó.

Por otra parte, los Mossos d’Esquadra arrestaron ayer a tres personas en una concentración antifascista en protesta a la instalación de una carpa del partido Vox en el barrio de Sant Andreu de Barcelona.

Las detenciones por desórdenes públicos y atentado a la autoridad se produjeron en torno a las 13.30 horas, cuando la Brigada Movil (Brimo) de los Mossos se desplegó para separar a ambos grupos, y existieron momentos de tensión.

La carpa de Vox se instaló en la calle Gran de Sant Andreu, y un centenar de manifestantes protestaron contra ello con una pancarta en la que se podía leer «Per un Sant Andreu antifeixista i combatiu».

El centro LGTBI (Lesbianas, gays, transexuales y bisexuales) de Barcelona sufrió en la madrugada del domingo un ataque una semana después de la inauguración de su sede, en la calle Comte Borrell, donde aparecieron pintadas en las que se puede leer «Estáis muertos» y la puerta de cristal fue rota. En un apunte de Twitter, la alcaldesa de Barcelona, Ada Colau, tildó este ataque de «cobarde», y aseguró que no provoca ningún miedo sino todo lo contrario. «Más que nunca sentimos orgullo de ser una ciudad diversa», añadió.