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Fortuny regresa a Reus

La Razón
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REUS- Marià Fortuny vuelve por la puerta grande a la ciudad que lo vio nacer. Una exposición con algunas de sus obras maestras fue inaugurada ayer en el Museo Salvador Vilaseca de Reus (Tarragona) para conmemorar el 175 aniversario del pintor.

Bajo el título de «Fortuny. El mito» se reúnen piezas de diferentes instituciones, especialmente el Museo Nacional de Arte de Cataluña (Mnac) que ha dejado hasta 27 piezas de sus fondos, algunas de ellas tan representativas como «La vicaría», «La odalisca», «El vendedor de estampas» o «Il Contino». En esta aproximación expositiva tampoco faltan piezas de colecciones privadas o instituciones como la Real Academia de Bellas Arte de Barcelona. Todo ello permite trazar un recorrido completo por los temas que inspiraron a uno de los autores más cotizados de su tiempo y cuyo éxito podría haber sido mayor de no morir prematuramente.

Comisariada por el profesor de Historia del Arte en la Universitat Rovira i Virgili (URV), Jordi Àngel Carbonell, y el jefe del Gabinete de Dibujos y Grabados del Mnac, Francesc Quílez, en la exposición se visualizan todos los estilos y las obsesiones de Fortuny. Por ejemplo, no falta la obsesión del pintor por los temas de inspiración árabe, como «Baños de Tánger» o un estudio para «Árabes subiendo una colina». Ese exotismo también lo encontró en las calles de Granada, como se ejemplifica con alguna de las composiciones que pintó en esa ciudad, destacando especialmente un inacabado óleo con la Alhambra como tema principal.

Uno de los hitos en la carrera de Fortuny es la pintura de carácter histórico, que tiene su punto culminante con «La batalla de Tetuán», una enorme tela que es objeto ahora de una completa exposición en el Mnac. Como precedente a ese trabajo, desde un punto de vista casi de reportero e investigador de la historia catalana, resaltan en Reus «Almogábares» o una visión totalmente mítica y épica de Ramón Berenguer III.

Tampoco faltan las menciones a los maestros que inspiraron al artista, como lo demuestra una copia de Fortuny del «Inocencio X» de Velázquez.