Horta inaugura dos zonas verdes

Las obras han permitido recuperar un solar y finalizar la mejora de los jardines de Can Fargues.

El Ayuntamiento de Barcelona inauguró ayer dos espacios verdes en el distrito de Horta-Guinardó, en la avenida de Can Marcet. Las obras han permitido arreglar el solar situado en el tramo de vía ente el paseo de la Vall d’Hebron y la calle de Joan B. Cendrós y se han creado nuevas zonas verdes y mejorado la accesibilidad.

Las obras han tenido una duración de más de seis meses y han supuesto una inversión de 1,5 millones de euros. En total, se ha actuado sobre una superficie de 5.843,20 metros cuadrados.

El Ayuntamiento de Barcelona también ha finalizado las obras de arreglo y mejora de los jardines de la masía de Can Fargues, situados en el Paseo Maragall, 383-389, en el distrito de Horta-Guinardó. Se trata de la parte correspondiente al jardín romántico. La actuación ha consistido en preservar la vegetación, densa y generadora de una sensación salvaje y sombría que define el carácter del jardín romántico de la masía.

En el límite del paseo Maragall y la calle Peris Mencheta se ha construido una pérgola que contiene con iluminación, malla metálica y que a la vez hace de soporte de la vegetación. También se ha instalado una jardinera en la zona de medianeras, en las que se han plantado bambúes y donde hay zonas para sentarse; a la vez que se ha recuperado la fuente ornamental y la estatua de los jardines. Con las obras, se ha aprovechado para mejorar la accesibilidad de la zona, y limpiar y ordenar el jardín de la masía. Los parterres se han delimitado con un bordillo metálico que dibuja claramente un límite entre la vegetación y el camino de tierra estabilizado. Con la intervención, se ha actuado sobre un total de 3.153 metros cuadrados y ha supuesto una inversión de 1,1 millones de euros.

Los jardines convivirán con la nueva Escuela Municipal de Música de Can Fargues inaugurada el pasado 2016. La obra de transformación de esta masía de origen medieval en equipamiento para el barrio supuso una inversión de casi 2,5 millones de euros.

La Masía de Can Fargues era uno de los edificios más emblemáticos y reivindicados del barrio de la Font d’en Fargues. El espacio incluye un conjunto de edificaciones adyacentes que datan de diferentes épocas y la parte más antigua es la zona central de la torre medieval que sobresale del resto de volúmenes que conforman la masía y que está catalogada como Bien Cultural de Interés Nacional (BCIN). Alrededor de esta se construyeron varias edificaciones según las necesidades funcionales.

Reivindicaciones vecinales

La recuperación de este espacio responde a una larga lucha vecinal que se inició después de que en 1997 la última propietaria de la Masía de Can Fargues vendiera la propiedad a una empresa. Ante estos hechos, la Asociación de Vecinos Font d’en Fargues y la Plataforma Salvem Can Fargues iniciaron una lucha para evitar que la empresa convierte la masía en un restaurante y edificara un geriátrico en el ámbito de los jardines, dañando -los. Después de 12 años de reivindicaciones, finalmente, en 2009, el Ayuntamiento de Barcelona compró la Masía para recuperarla por la ciudad.