Exposición

Jordi Bermet, disparos de tinta

BCNegra dedica una exposición al gran dibujante barcelonés

La obra de Bermet a quien rinde homenaje BCNegra está marcada por el blanco y el negro
La obra de Bermet a quien rinde homenaje BCNegra está marcada por el blanco y el negrolarazon

BCNegra dedica una exposición al gran dibujante barcelonés.

Si hay un dibujante que ha sabido traducir en tinta y lápiz el espíritu del género negro, no busquen muy lejos porque lo encontrarán aquí, en Barcelona. Se llama Jordi Bernet y es el responsable de series tan exitosas como «Torpedo 1936» o «Clara de Noche». Su obra es la protagonista de una exposición en la Biblioteca Jaume Fuster que sirvió ayer para dar el pistoletazo de salida a BCNegra.

La muestra, comisariada por Joaquim Noguero, es una aproximación a uno de nuestros dibujantes con más reconocimiento internacional, como lo demuestran los premios recogidos en certámenes fundamentales en el mundo del cómic en Agulema, San Diego y Barcelona. Con la ausencia de originales aunque con la presencia de excelentes reproducciones de dibujos de este autor.

La obra de Bernet está marcada por el blanco y negro, el mismo que podemos encontrar en los mejores fotogramas del género con Humphrey Bogart o Edward G. Robinson como protagonistas y bajo la dirección de Fritz Lang, Billy Wilder o John Huston.

Noguero se cuida de subrayar que los orígenes de Bernet son negros porque, desde muy joven, tuvo que encargarse de Doña Urraca, una serie que realizaba para Bruguera. Ese es el punto de partida de una carrera marcada por un estilo muy personal y realista, con ecos cinematográficos y esa tradición de cómic policial estadounidense, la de Will Eisner, Milton Caniff o Frank Robbins.

Todo ello se ve en la gran obra maestra de Bernet, «Torpedo 1936», una serie negra creada por el guionista Enrique Sánchez Abulí y en un primer momento en manos de los pinceles y rotuladores de Alex Toth. Tras la marcha de Toth, que no se siente muy a gusto con la violencia de los guiones, Bernet se adueña de un personaje aparentemente antipático: un matón llamado Luca Torelli que en ocasiones cuenta con la colaboración de un torpe ayudante llamado Rascal. Bernet sabe darle la entidad a estos personajes en historietas cortas y alguna larga con un grafismo de gran expresividad en un contundente blanco y negro. Una polémica tras una canción de Loquillo interrumpe para siempre que Bernet siga dibujando los textos de Sánchez Abulí.

El dibujante también se ha encargado de convertir en dibujo las palabras de Jim Thompson en «1280 almas» o James M. Cain en «El cartero siempre llama dos veces». Una mención aparte la merece una de sus pocas incursiones en el mundo del humor. Es Clara de Noche, la prostituta de buen corazón que durante años pudo encontrarse en las páginas de la revista «El Jueves» con guiones de Trillo y Maicas.

Y un ruego cuando visitan la exposición. Hay dos dibujos de Jordi Bernet que justifican cualquier exposición sobre este autor, ambas con Torpedo como protagonista. Por un lado, una recreación de la famosa cafetería nocturna pintada por Edward Hopper, pero traducida en el blanco y negro de Bernet. Por otra parte, una recreación del asesinato Batman en un oscuro callejón donde todavía sigue humeante el revólver de Luca Torelli. Eso es algo que solamente lo saben hacer los maestros.