Cataluña

Junqueras desvela el plan B si no hay referéndum: declaración de independencia

El Govern prepara un acto esta semana para ratificar su compromiso con la consulta que no entusiasma a la CUP

El vicerpesidente, Oriol Junqueras a su llegada a la reunión semanal del gobierno catalán tras las vacaciones de Semana Santa.
El vicerpesidente, Oriol Junqueras a su llegada a la reunión semanal del gobierno catalán tras las vacaciones de Semana Santa.larazon

El Govern prepara un acto esta semana para ratificar su compromiso con la consulta que no entusiasma a la CUP.

A medida que se aproxima la presunta fecha del referéndum de autodeterminación de Cataluña (segunda quincena de septiembre), el Govern comienza a admitir de forma pública las dificultades para su celebración. Ningún cargo de la Generalitat lo había hecho con tanta contundencia como ayer el vicepresidente catalán y líder de ERC, Oriol Junqueras, que desveló el plan B durante un almuerzo-coloquio protagonizado junto al economista Xavier Sala i Martín dentro del ciclo «El Moment Zero». El economista se mostró partidario de plantear un «ultimátum» al Estado en el sentido de «o hay referéndum o hay independencia» y Junqueras recogió el guante: «Esto ya está recogido en el programa electoral (de Junts pel Sí) y se llama cláusula de desbloqueo».

La declaración unilateral de independencia (DUI) fue incluida, efectivamente, en el programa de Junts pel Sí aunque quedó condicionada a una previa «desconexión del ordenamiento jurídico». No obstante, después de que JxSí y la CUP (el bloque independentista) sumaran el 47,8 por ciento de los votos en las elecciones de 2015–una cifra inferior al 50,01 por ciento–, los socios soberanistas descartaron la ruptura unilateral.

Conforme avanzó la legislatura, los socios modificaron sobre la marcha la hoja de ruta soberanista y situaron, de nuevo, como prioridad la celebración de un referéndum, un objetivo que, en principio, continúa vigente por parte del Govern y de la CUP. De hecho, los anticapitalistas consideraron ayer que la declaración unilateral de independencia tan sólo debería acometerse en un único caso: el impedimiento físico del voto en referéndum. «Entendemos que el único escenario que permitiría no hacer un referéndum sería el día en que físicamente el referéndum no se dejara hacer», dijo el diputado de la CUP Albert Botran.

El plan B dado a conocer por Junqueras sembró la confusión y obligó a Junts pel Sí a tomar posiciones para clarificar, por enésima vez, la hoja de ruta del Govern. «El plan A, B, C, D y todos los que puedan venir es el referéndum, referéndum, referéndum», manifestó el portavoz adjunto de Junts pel Sí, Roger Torrent (ERC). Y añadió: «No hay ninguna novedad, no se ha dicho nada que no estuviera planteado en la hoja de ruta. Lo único que hemos hecho es enriquecer la hoja de ruta con la incorporación del referéndum. El resto de la hoja de ruta, incluido el referéndum, sigue intacta».

La CUP marca distancias

Antes de que Junqueras sacudiera los planes soberanistas, el Govern confirmó que planea celebrar esta misma semana un acto público para ratificar su compromiso con el referéndum. La CUP contempla con cierto escepticismo esta escenificación, puesto que considera que es el momento de dar pasos concretos y de abandonar la grandilocuencia. Los anticapitalistas condicionaron su participación a que este acto sirva para fijar de forma clara fecha y pregunta. «Solo así tendría sentido y cogería cuerpo este acto», afirmó el diputado Albert Botran.

Más distante todavía se mostró Catalunya Sí que es Pot (la marca de Podemos e ICV), que explicó que no ha sido informado de este acto y que, en todo caso, defiende el Pacto Nacional por el Referéndum.

El PP exige a Colau retirar la campaña por el referéndum

El líder del PP en Barcelona, Alberto Fernández, exigió ayer a la alcaldesa y presidenta del Área Metropolitana de Barcelona (AMB), Ada Colau, la «retirada inmediata» de la campaña del Pacte Nacional pel Referèndum en el Metro y autobuses de Transports Metropolitans de Barcelona (TMB) con mensajes a favor de la consulta separatista. Según él, se vulnera la norma de publicidad de TMB de 2009 que excluye mensajes ideológicos y sobre creencias individuales –«incluidas campañas que buscan provocar el debate social y eco mediático»–, y recordó que se publicita un «acto ilegal como el referéndum».