CUP
La CUP deja los presupuestos de Junts pel Sí en vía muerta
Los anticapitalistas anuncian una enmienda a la totalidad y exigen al Govern una propuesta «desobediente»
Oriol Junqueras no iba desencaminado cuando afirmó este viernes ante los empresarios del Círculo de Economía que no podía garantizar la aprobación de los Presupuestos este año. La CUP confirmó los temores del vicepresidente de la Generalitat después de decidir ayer que presentará una enmienda a la totalidad a los presupuestos. No es un portazo definitivo, pero aproxima las cuentas del Govern a la vía muerta. A Junts pel Sí le queda la opción, no obstante, de comenzar a realizar concesiones en la línea de desobedecer las obligaciones como el objetivo de déficit o las suspensiones del Tribunal Constitucional para buscar el entendimiento con la CUP.
«La propuesta del Govern no incluye ninguna –o casi ninguna– de las demandas de la CUP y por eso hoy hemos decidido que necesitamos tiempo para negociar una propuesta más completa», argumentó la diputada Eulàlia Reguant para justificar la postura de su formación.
Los anticapitalistas únicamente habilitaron un portillo que Junts pel Sí tendrá que cruzar a gachas si quieren hallar un acuerdo. «Los presupuestos que la CUP podría votar favorablemente tienen que plantear una desobediencia clara y frontal en relación a las suspensiones del Estado español y eso significa desobedecer los límites de déficit, desobedecer la suspensión de leyes, desobedecer la suspensión de sistemas de recaudación, así como a los mercados financieros, es decir, impagar la deuda y los intereses y plantear la reversión de las privatizaciones y de los recortes de los últimos años. Sin eso no creemos que sean unos presupuestos independentistas ni sociales», expuso Eulàlia Reguant.
El trágala de la CUP complica enormemente el acuerdo, sobre todo después de que el presidente de la Generalitat, Carles Puigdemont, haya descartado practicar la desobediencia y haya garantizado actuar conforme al principio de seguridad jurídica.
La semana entrante será decisiva para comprobar si hay posibilidades de reconducir las conversaciones entre Junts pel Sí y la CUP. Un fracaso en los presupuestos podría precipitar el fin de una legislatura que, en principio, sólo debía durar 18 meses. Sin embargo, Junqueras ya ha dicho en alguna ocasión que un escenario de prórroga presupuestaria no es tan inhabitual y, por tanto, el Govern de Junts pel Sí podría intentar seguir un tiempo su andadura mientras da vuelo a las estructuras de Estado. Dependerá, en todo caso, de las decisiones que tome la CUP.
✕
Accede a tu cuenta para comentar