La Villarroel recupera el «Othello» más sui generis

El director teatral argentino Gabriel Chamé vuelve a la Villarroel para presentar su particular «Othello», una obra que «mezcla Shakespeare y Chaplin».

La disociación provoca sorpresa y emoción. Si separas dos elementos interconectados entre sí y sustituyes uno de ellos por un contrario, lo que se consigue es abrumador. Imaginen «Othello», la gran historia trágica de celos de Shakespeare. Recuerden los monólogos y diálogos poéticos cargados de drama y sufrimiento. Ahora, en lugar de visualizar un actor correspondiendo a ese drama, sitúen a un «clown» que se mueve con torpeza y gracia. la sorpresa es mayúscula, pero la satisfacción es todavía mayor.

El director teatral argentino Gabriel Chamé vuelve a la Villarroel para presentar su particular «Othello», una obra que «mezcla Shakespeare y Chaplin», según reconoce el mismo Chamé. Después de convertirse en uno de los grandes éxitos críticos y de público del final de la temporada pasada. Ahora regresa con toda su originalidad intacta. Del 18 de septiembre al 16 de octubre la pieza ocupará el escenario grande. Paralelamente, Chamé también estrenará en la Off de la Villarroel «Llegué para irme», obra de teatro gestual.

El «Othello» cuenta con cuatro actores que interpretan a todos los personajes importantes de la obra de Shakespeare, en un montaje con una puesta en escena sencilla, en las que unas cuantas cajas y telas sirven para crear todos los espacios escénicos de la obra. «Es una dramaturgia completamente contemporánea», afirma la directora esta sala teatral, Tania Brenlle, especializada en autores contemporáneos y nuevas dramaturgias. Chamé trabajó durante un año sólo en la traducción y adaptación de la pieza, pero fue un tiempo bien invertido.