Los alérgicos ya pueden disfrutar del placer de comer fuera de casa sin jugársela

Barcelona

No se sabe aún con exactitud qué desencadena una alergia o intolerancia alimentaria. Existe, según los expertos, un claro componente hereditario, pero el factor ambiental es clave. En la última década, la cifra de diagnósticos de alergias se ha duplicado, según la Sociedad Española de Alergología e Inmunología. Hoy, alrededor de 1,3 millones de personas en España tienen una alergía alimentaria.Los síntomas son muy variados pero una vez aparecen, sean más o menos intensos, el impacto en la persona es evidente: limita su vida social, laboral y escolar. La ciencia debe aún desentrañar quiénes, cómo y cuándo desarrollarán una alergia alimentaria, pero los afectados, ante esas limitaciones, no quieren esperar. Allergychef es un ejemplo de su movilización.

Se trata de una plataforma online donde las personas alérgicas o intolerantes a uno o varios alimentos, así como sus familiares o amigos, pueden reservar mesa gratuitamente en restaurantes «formados, concienciados y sensibilizados» con esta problemática. De hecho, Allergychef nace de una necesidad. Alérgica desde pequeña a 16 alimentos, Marina Saurí siempre ha tenido problemas para poder salir a comer o cenar con amigos sin miedo a sufrir una crisis anafiláctica, la reacción más grave, o simplemente sin sentirse la rara del grupo. Alfonso Costas no es alérgico, pero su pareja sí, así que indirectamente sufre las limitaciones de la enfermedad a la hora de disfrutar de una velada fuera de casa. Con 20 años, a Miriam Piñol le diagnosticaron celiaquía y sabe qué significa evitar el gluten, en casa y en restaurantes. Los tres son los creadores y el motor de Allergychef.

De momento, una veintena de restaurantes de Barcelona se han sumado a la iniciativa. Así, de forma fácil y ágil, en la web de Allergychef se pueden consultar la ficha de cada uno y reservar. Para ello, explica Alfonso, los usuarios pueden registrarse y rellenar un cuestionario sobre las alergias e intolerancias a tener en cuenta, de manera que con el aviso de reserva, al restaurante le llegue también la información sobre los alimentos a evitar. Cabe la posibilidad de pedir mesa sin registro previo, aunque igualmente es necesario especificar las alergias. Hacerlo limita que puedan haber malentendidos y da un mayor margen los cocineros para adaptar los platos y evitar contaminaciones entre alimentos.

Los responsables, tanto de sala como de cocina, de los restaurantes han tenido que superar una formación para formar parte de Allergychef, apunta Costas. El curso lo imparte la Sociedad Catalana de Alergia e Inmunología Clínica. Como explica, Lluís Nadal, propietario y cocinero del restaurante Mercedes, la formación en sí son conceptos de «sentido común». De hecho, Mercedes no es un restaurante pensado y creado para alérgicos, sino un lugar donde «cocinar se entiende como un proceso», donde no todo vale. Conocer las propiedades de cada alimento, su procedencia, cómo combinarlos y cómo cocinarlos son condiciones indispensables para emplatarlos. Sin ello, para Nadal, no tendría sentido cocinar, porque «uno tiene una responsabilidad con el cliente».

Buena acogida

Otros doce establecimientos están ahora realizando el curso. El objetivo de Allergychef es expandir el servicio al resto de Cataluña, España y, finalmente, a nivel internacional.

Además, cada restaurante se ha comprometido a destinar parte de lo recaudado con cada uno de los usuarios a la investigación de las alergias y las intolerancias a través de Allergychef.