Festivales de Música

Los felices y gratuitos primeros días del Primavera

La chulería lírica de 7 notas 7 colores, la delicadeza de Gordi y la intensidad de Local Natives ponen la guinda a Saint Etienne demuestra su vigencia en la jornada gratuita del Primavera Sound que vuelve a llenar el Fórum

Escenario del Primavera Sound.
Escenario del Primavera Sound.larazon

La chulería lírica de 7 notas 7 colores, la delicadeza de Gordi y la intensidad de Local Natives ponen la guinda a Saint Etienne demuestra su vigencia en la jornada gratuita del Primavera Sound que vuelve a llenar el Fórum.

Unos niños de cuatro y cinco años bañándose en ropa interior en una fuente frente a un escenario donde acaban de actuar los recuperados 7 Notas 7 Colores. Ésta es la primera imagen del Primavera Sound 2017, que ayer abría sus puertas en su tradicional jornada gratuita. Qué quiere decir esto. Que no hay relato, ni narración posible en un festival, sólo bellas estampas, dulces momentos que recordar. Y éste fue uno bueno para empezar, con una docena de guiris aplaudiendo la feroz alegría de los chiquillos. No hay nada que temer, no parece que falté mucho para que estos también se queden en ropa interior y los imiten. Tal vez seis cervezas más, tal vez incluso menos. Al menos parecían compartir la misma euforia. La diferencia está en que sus padres no se sentirán tan orgullosos.

Después del despertar de Anímic a las. 17.00 horas y la rotundidad de 7Notas 7 Colores, con su efervescencia hihopera de los 90 intacta, la australiana Gordi puso un poco de pausa al festival. «Sé que en español mi nombre significa bebe gordo, pero no está hecho a propósito», dijo nada más empezar. Y tenía razón, no parecía un bebé gordo, más bien uno lánguido y élfico de largos cabellos ondulados, con un pop folk ideal para acariciar caballos y sentirse en paz con la naturaleza. Todavía no tiene un disco bajo el brazo, pero tiene las ideas claras y sabe comunicarlas.

Después llegaron desde Los Ángeles Local Natives, una banda de rock con voces angelicales y suma espiritualidad, cuya fuerza rítmica es contagiosa. Aquí llegó la segunda imagen del festival, un pelirrojo de dos metros, encarnación del Groot de «Guardianes de la galaxia», con pantalones cortos y las piernas tatuadas con las caras de Buddy Holly, Morrisey, Tom Waits y Nick Cave. El artista que se los hizo era un fenómeno, aunque Waits se parecía más a Harpo Marx. Verlo bailar recordaba a los niños en la fuente, la misma alegría, la misma euforia.

A las 21.00 horas le tocaba el turno a Jarvis Cocker y sus misteriosas meditaciones en el Heineken Hidden Stage. Había muchas ganas de saber qué significaba eso de «meditaciones» y lo que significaba era que Jarvis pedía a todos que se sentaran en el suelo y a oscuras el señor Pulp ponía voz de Poe y hablaba de confort con misterio con samplers de Marvin Gaye. Luego hablaba de mantras y «ahhhh», ponía como ejemplo. Interesante, vamos. La voz de Jarvis sigue siendo tan irónica como persuasiva y como performance fue un éxito cuando apareció por fin el “sexual healing” de Gaye.

Sólo quedaba el plato fuerte, Saint Etienne, con su máquina de hitazos noventeros con ese pop sublime y con el añadido de la carismática Sarah, imagen de una época perdida. Y esto sólo era el aperitivo, hoy jueves es la fiesta grande, la que los novios acaban desnudos bañándose en la fuente... Y sus padres, orgullosos.

Hoy, para estrenar junio, se podrá disfrutar de actuaciones como las de Bon Iver, The Black Angels, Mishima, The Molochs, Death Grips o Aldous Harding, entre otros. Todo ello dentro del Parque del Fòrum para seguir la fiesta del Primavera.