Los independentistas vuelven a tensar la calle con vistas a la sentencia del procés

Vuelta a la carga del independentismo tras semanas de desencuentros entre los partidos. Tras varios cruces de declaraciones y diferentes estrategias entre las formaciones, una nueva plataforma intenta mostrar una unidad temporal a pocos días de la diada. «Tsunami democràtic» nació ayer para encontrar una posición unitaria dentro del fraccionado secesionismo y ante lo que se presume como un otoño caliente. Con un escueto mensaje en las redes sociales en el que se puede ver un vídeo una olla hirviendo, la nueva iniciativa defiende dar una respuesta «no violenta» a la sentencia del juicio del «procès». La página web del movimiento ofrece un contador que finalizará el próximo jueves y que se espera que se detallen las intenciones de la plataforma. Todas las fuerzas secesionistas, desde Torra o Puigdemont a la CUP, bendijeron el movimiento que propone impulsar una campaña de movilización contra la sentencia del juicio. Sin referencias de partidos ni instituciones, el manifiesto propone «en el momento donde todo parece estar parado» dar un «nuevo impulso» al movimiento soberanista.

El intento de mostrar una unidad que parecía finalizada y tras la cumbre entre entidades soberanistas celebrada en Ginebra durante todo el fin de semana, el «tsunami» parece ser la manera de relegar a la calle aquello en lo que los partidos no se ponen de acuerdo. Bajo el paraguas de la sociedad civil, los partidos se guardan las espaldas para dar respuesta a la sentencia. Bajo la excusa de «defender derechos y la democracia», el manifiesto deja entrever que lo que se propone es volver a la carga entre todas las asociaciones y partidos secesionistas. Esto, aunque ha sido bendecido por diferentes dirigentes de ERC como Oriol Junqueras, choca frontalmente con la estrategia seguida por el partido en las últimas semanas que intentaba rebajar el tono de discrepancias.

Resulta de especial relevancia que el manifiesto haya aparecido cuando el movimiento independentista no pasa por su mejor momento, precisamente, a pocos días de celebrarse una nueva Diada tomada por los independentistas un año más.