Barcelona

Los obispos de Solsona y Tortosa se oponen a secundar la vía soberanista

La Iglesia catalana rechaza ser utilizada políticamente y pide trabajar por el entendimiento desde el diálogo

Xavier Novell, ex obispo de Solsona
Xavier Novell, ex obispo de Solsonalarazon

BARCELONA- La Asamblea Nacional de Cataluña (ANC) ha pedido que las iglesias hagan resonar sus campanas a las 17.14 horas del 11 de septiembre con motivo de la cadena humana que realizarán para reivindicar la independencia. Sin embargo, la propuesta ya ha encontrado oposición y los obispos de Solsona y Tortosa han pedido a las parroquias de sus diócesis que no participen en la iniciativa.

El obispo de Solsona, Xavier Novell, ha enviado una carta privada a los párrocos con esta petición porque «la Iglesia debe permanecer neutral» en temas políticos. Novell en su glosa semanal, publicada en la web del Obispado, recuerda que «hay un sector importante de la ciudadanía que no comparte este proyecto y que el Gobierno de España parece que responderá negativamente a la petición formal para realizar un referéndum legal sobre esta cuestión». El obispo más joven de España añade que a la Iglesia católica en Cataluña no le corresponde «optar por una determinada propuesta a estos retos nuevos, pero defendemos la legitimidad moral de todas las opciones políticas que se basen en el respeto de la dignidad inalienable de las personas y de los pueblos».

En su glosa semanal, Novell también ruega por que «alentamos el camino del diálogo y el entendimiento entre todas las partes interesadas con objeto de lograr soluciones justas». También pide a los fieles no ser ajenos a esta situación histórica, además de recordar que las graves necesidades sociales deben preocupar mucho más. El obispo de Solsona concluye su texto con una petición a sus feligreses: «Ruego a Dios que esta cuestión no divida a los fieles de la diócesis puesto que la fe que nos une es mucho más grande que las respectivas ideas políticas».

Tortosa y Tarragona

Xavier Novell no está solo en su reivindicación. Su homólogo en Tortosa adelantó ayer que pedirá a las parroquias de la diócesis que no permitan el repique de campanas que piden los independentistas, argumentando que la Iglesia no tiene que defender ningún posicionamiento político.

Por su parte, el obispo de Tarragona expresó, aunque no de manera tan contundente, sus reticencias a la participación de las parroquias en la Vía Catalana asegurando que «no ve muy adecuado» que se hagan repicar las campanas. Sin embargo, ha querido dejar la decisión final en manos de los párrocos y de los consejos parroquiales de los municipios.

Otros, como Francesc Pardo, obispo de Girona, sí mostraron públicamente su apoyo a la celebración de una consulta para conocer «la opinión real» de los catalanes sobre su futuro. Pardo apuntó que los catalanes deben tener «el derecho y el deber» de manifestar su opinión sobre lo que consideró como asuntos «importantes y esenciales».

Quien no ha hecho todavía ningún tipo de declaración sobre la cadena humana es el cardenal arzobispo de Barcelona, Lluís Martínez Sistach, ignorándose qué harán las parroquias de la capital catalana.

La Asamblea Nacional de Cataluña admitió ayer que cada sede de la ANC en cada población catalana ha negociado directamente con las parroquias para que repiquen las campanas.