Mas ultima una declaración para desafiar la nueva ley de Wert

BARCELONA- A iniciativa de Artur Mas, los partidos catalanes que defienden el catalán como única lengua vehicular en la escuela escenificarán hoy en el Palau de la Generalitat un cierre de filas respecto a la inmersión lingüística y solemnizarán su desafío al ministro de Educación, José Ignacio Wert, al que acusan de querer dinamitar el modelo. Mas ha convocado esta tarde a los líderes de PSC, ERC, ICV, así como a representantes del Consejo Escolar de Cataluña para reafirmar la conveniencia de «un modelo lingüístico de éxito».

El presidente de la Generalitat en funciones no tendrá problemas para consensuar una declaración en defensa de la inmersión porque el Parlament ya ha aprobado en otras ocasiones iniciativas idénticas. Sin embargo, formaciones como ICV quieren introducir otros aspectos en el orden del día –y no sólo el sistema lingüístico– alegando que la comunidad educativa tampoco ve con buenos ojos temas como las pruebas de reválida o el trato que se quiere dispensar a la educación pública.

El portavoz en funciones de la Generalitat, Francesc Homs, censuró el anteproyecto del ministro Wert en términos competenciales porque, a su entender, «la función de nuestra administración pasa a ser únicamente ejecutiva y eso vulnera la Constitución». «Si quieren reformar la Constitución que lo hagan de manera abierta y transparente, no por la puerta de atrás y, además, de manera chapucera», criticó Homs, que no quiso dar más detalles sobre la cumbre de hoy.

Lo que está claro es que Mas busca liderar el rechazo a la reforma planteada por Wert y aprovechar el malestar de la comunidad educativa catalana, mayoritariamente crítica con el anuncio de la reforma educativa. La escuela pública, la concertada, así como sindicatos y asociaciones de padres de alumnos han avisado al ministro de que no darán «un paso atrás». Representantes de la escuela concertada –la Agrupació Escolar Catalana (Aec); la Asociación Profesional de Servicios Educativos de Catalunya (Aspec); la Confederación de Centros Autónomos de Enseñanza de Catalunya y la Federación Catalana de Centros de Enseñanza–, firmaron un manifiesto donde aseguran que apoyarán todas las iniciativas que defiendan el catalán y, de hecho, se preparan para salir de nuevo a la calle mañana en defensa de la inmersión.

El ministro Wert sostiene que no todas estas reacciones –y en especial la de la Generalitat– en torno a su reforma educativa no están justificadas porque el nuevo modelo no ataca la inmersión lingüística. Wert subraya, además, que su anteproyecto respeta en todo momento la doctrina del Tribunal Constitucional, el Tribunal Supremo y el propio Estatuto catalán.

Claves del pacto

1.- La iniciativa

Cuando Wert presentó su anteproyecto de reforma educativa, Mas se apresuró a anunciar una cumbre para liderar el rechazo desde Cataluña.

2.- Los protagonistas

Mas ha convocado a los líderes de ERC (Oriol Junqueras), PSC (Pere Navarro) e ICV (Joan Herrera) y no ha citado ni a Alicia Sánchez-Camacho ni a Albert Rivera.

3.- El contenido

Se prevé que de la reunión de esta tarde salga una declaración para reafirmar la vigencia de la inmersión y para desafiar al Gobierno.

El Ayuntamiento de Barcelona, contra la reforma

El rechazo a la reforma educativa de Wert tomó ayer forma de declaración institucional en el Ayuntamiento de Barcelona. Todos los grupos municipales, con excepción del PP, suscribieron un manifiesto que censura la futura Ley Orgánica de Mejora de la Calidad Educativa (Lomce) y apoya el modelo de inmersión lingüística catalán. La declaración va en la misma línea que la que el Ayuntamiento de Barcelona aprobó en el pleno extraordinario de septiembre de 2011, en apoyo a la inmersión lingüística, justo después de que el Tribunal Superior de Justicia de Cataluña (TSJC) otorgara un plazo de dos meses a la Generalitat para incorporar el castellano como lengua vehicular en la enseñanza. Una sentencia sobre la que el Govern hizo oídos sordos, alegando que la inmersión garantiza el dominio del castellano y catalán.