El desafío independentista

Máxima alerta: dispositivo de 2.000 policías y guardias frente a los CDR

Un dispositivo flexible en función de lo que ocurra. Unos 500 agentes de Policía y Guardia Civil reforzarán las plantillas actuales en previsión de incidentes.

Agentes de la Guardia Civil y de los Mossos d’Esquadra
Agentes de la Guardia Civil y de los Mossos d’EsquadralarazonLa Razón

Un dispositivo flexible en función de lo que ocurra. Unos 500 agentes de Policía y Guardia Civil reforzarán las plantillas actuales en previsión de incidentes.

Última hora del 1-O en directo | Los CDR marcan sus objetivos: “Haremos temblar al enemigo”

Los cuarteles de la Guardia Civil en Cataluña pueden ser hoy el objetivo preferente de los incidentes que grupos separatistas. Tratan de «vengarse» por la operación en la que la Benemérita ha desarticulado una célula terrorista vinculada a los Comités de Defensa de la República (CDR).

El Ministerio del Interior ha previsto, en principio, un refuerzo de 500 agentes de Policía Nacional y Guardia Civil, que se sumarán a las plantillas existentes, ante la posibilidad de que grupos extremistas del independentismo provoquen incidentes a lo largo del día de hoy, según han informado a LA RAZÓN fuentes conocedoras del despliegue. Estos agentes se encargarán de la protección de los edificios de la Administración Central del Estado, acuartelamientos de las Fuerzas Armadas y de Seguridad, puertos y aeropuertos e instalaciones críticas.

En función de la marcha de los acontecimientos, la cifra de 500 podría pasar hasta 2.000 agentes, que ya están preparados para, en un breve plazo, hacer acto de presencia donde se requiera su intervención.

Por los datos de que disponían los Servicios de Información, los referidos grupos extremistas no tenían previsto hacer «demasiado ruido» a lo largo del día de hoy, al cumplirse el segundo aniversario del plebiscito.

Sin embargo, la reciente operación de la Guardia Civil contra una célula terrorista del ERT-CDR, que preparaba atentados que iban a iniciarse precisamente en esta jornada, ha cambiado las cosas. El mundo del separatismo, en vez de reconocer lo que es evidente, ha reaccionado mediante acusaciones de «montaje policial» y presentan las actuaciones de la Benemérita como una muestra de la «opresión que sufre Cataluña».

Por ello, desde este pasado fin de semana han celebrado asambleas en las que se han diseñado las protestas a realizar. Ayer por la tarde, tan solo se conocía la convocatoria de una manifestación de la Asamblea Nacional Catalana (ANC) que recorrería varias calles céntricas de Barcelona; otras, d estudiantes, pero se da por hecho que se producirán incidentes, como ha ocurrido en otras ocasiones. Por ejemplo, en Gerona la manifestación terminará frente al cuartel de la Guardia Civil.

Los CDR celebraron a lo largo de la tarde de ayer diversas asambleas con el fin de concretar los puntos en los que iban a intentar provocar incidentes de orden público. Tal y como adelantó LA RAZÓN, muchos de ellos han decidido actuar bajo el paraguas de la plataforma Nos Plantamos, que tiene previsto convocar un acto central al que les gustaría que asistieran unas 10.000 personas; y otros periféricos. Su intención es el de realizar una «acampada» permanente, lo que se supone evitarán los Mossos d’ Esquadra.

La Guardia Civil y la Policía se ocuparán, entre otras misiones, de la protección de los edificios públicos y de sus acuartelamientos. La sede de la Zona de la Guardia Civil en Barcelona, en Travesera de Gracia, se ha convertido en una obsesión para los CDR y separatistas en general. La última concentración fue respondida con la difusión del Himno del Cuerpo por unos altavoces exteriores, algo que desconcertó a los secesionistas. Sin embargo, tal y como denuncia la AEGC, este tipo de provocaciones inciden de forma negativa entre los hijos menores de los guardias civiles que viven en éste y otros acuartelamientos, ya que no llegan a comprender el odio que transmiten los manifestantes hacia sus progenitores, por el mero hecho de pertenecer a un Cuerpo que si por algo se ha caracterizado, incluso en épocas muy difíciles, ha sido por defender la paz y la seguridad de los catalanes.

Fuentes de Policía y Guardia Civil de esta comunidad autónoma han destacado, por otra parte, que en los últimos tiempos, siempre que se les ha requerido, los Mossos han acudido para evitar, dentro de sus competencias, los incidentes que los separatistas querían provocar.

En el primer aniversario del referéndum ilegal, bastó un despliegue de unos 600 agentes de la Guardia Civil y la Policía para evitar incidentes. Una cifra, en todo caso, sensiblemente inferior a los 6.000 que se desplazaron a Cataluña en los días anteriores y posteriores al plebiscito ilegal, dentro de la «operación Copérnico». A diferencia de entonces, se ha previsto todo lo relativo al alojamiento de los agentes.