Barcelona

Padres de 151 alumnos piden una enseñanza bilingüe a la Generalitat

La polémica inmersión lingüística sitúa al catalán como única lengua vehicular
La polémica inmersión lingüística sitúa al catalán como única lengua vehicularlarazon

La entidad probilingüismo Convivencia Cívica Catalana (CCC) informó ayer, a través de un comunicado, de que familias de un total de 151 alumnos pertenecientes a más de 60 escuelas catalanas han remitido un escrito a la conselleria de Enseñanza con el objetivo de solicitar una educación bilingüe, por lo que las peticiones recibidas en este sentido por CCC se elevan a más de 1.300.

Las peticiones fueron presentadas ayer a primera hora de la mañana por el secretario de CCC, José Antonio martínez, que además celebró el reciente fallo del Tribunal Superior de Justicia de Cataluña (TSJC), que permite que estos alumnos reciban el 25 por ciento de la enseñanza en castellano.

Caso omiso

Desde hace más de 30 años, los diferentes departamentos de Enseñanza han aplicado la denominada política de inmersión lingüística, que en la práctica reduce la asignatura de lengua castellana a dos horas a la semana, al mismo nivel que una lengua extranjera.

La Generalitat, tanto en las épocas del tripartito como con las de CiU, siempre ha hecho caso omiso de las numerosas sentencias judiciales favorables a acabar con la marginación del español en las aulas. La actual consellera, Irene Rigau, también se ha mostrado siempre de acuerdo con esta postura.

Las solicitudes presentadas en esta ocasión corresponden a alumnos que cursan sus estudios en centros de Barcelona, Badalona, L'Hospitalet de Llobregat, Cornellà, Esplugues, Granollers, Sant Cugat del Vallès, Tarragona, Girona, Valls, Vic, Montgat, Sitges, Igualada, Terrassa y Sabadell.

Según explicaron ayer fuentes de CCC, consideran que en los próximos tiempos «se va a producir un goteo permanente» de solicitudes de padres que quieren que sus hijos puedan aprender en las dos lenguas, y no tan exclusivamente en catalán.

Según esta asociación, la mayoría de padres en Cataluña quieren una enseñanza bilingüe para sus hijos, por lo que criticó la «obsesión del nacionalismo catalán por arrinconar y excluir de las escuelas el castellano, que es la lengua que habla mitad de la población». Por su parte, la conselleria confirmó que recibió las peticiones y que está estudiando las solicitudes.

En su comunicado, Convivencia Cívica Catalana apela al gobierno catalán a «abandonar su intolerancia nacionalista» y su «modelo monolingüe para sustituirlo para un sistema bilingüe, que respete el derecho a decidir de los padres y la realidad bilingüe de nuestra sociedad».

Por su parte, Rigau anunció ayer que, en el recurso que presentarán hoy contra el citado auto del TSJC, su argumentación se basará en demostrar que «es una evidencia que el castellano no es residual en Cataluña, y mucho menos en el sistema educativo».

La consellera, que compareció ante la comisión de Enseñanza y Universidades en el Parlament, señaló que se crean «algunos imaginarios para que calen en la población que se puedan confundir con derechos para poder ser reivindicados». «No podemos obviar el conjunto político y social en el que aparecen determinadas peticiones», afirmó la consellera, en alusión a las políticas lingüísticas del PP en otras zonas.