Caso Campeón

Piden tres años de cárcel para Cuervo por cobrar dos sueldos en el Sant Pau

La Razón
La RazónLa Razón

El proceso judicial por una supuesta mala gestión e irregularidades en el Hospital Sant Pau de Barcelona sigue su curso. A la espera del correspondiente juicio, la Fiscalía anunció ayer que pide tres años de cárcel para el ex delegado de la Generalitat en Madrid José Cuervo, en la época del tripartito.

Concretamente, el Ministerio Público le acusa de un delito de estafa por el doble sueldo que cobró del Instituto Catalán de la Salud (ICS) y del mismo Sant Pau. Presuntamente, y siempre según la versión de la Fiscalía, Cuervo ocultó información a sus superiores.

En su escrito de acusación, el fiscal también solicita que se impongan dos años de cárcel para el ex gerente de la Fundación Privada de Gestión Sanitaria del Sant Pau (FSG) Jordi Varela como cooperador necesario para urdir y mantener el «engaño» al ICS.

Petición de archivo

Por contra, el fiscal solicita que se archive la causa contra el tercer imputado, el exgerente de la Fundación Patrimonial del centro Jordi Bach, al considerar que no se ha podido justificar debidamente que participara en el delito de estafa.

En su escrito, el fiscal subraya que tras, cesar como delegado de la Generalitat en Madrid, en diciembre de 2010, Cuervo reingresó como inspector médico del ICS, dada su condición de funcionario, si bien le correspondía un suelo de 60.186 euros anuales, frente a los más de 80.000 euros que cobró del tripartito. Cuervo fue contratado para desarrollar el Campus Universitario de Sant Pau y asesorar en la construcción de nuevos edificios destinados a la investigación científica.

Según el fiscal, Cuervo se enfrentó en su retorno a la función pública a una situación de «indefinición», ya que la categoría a la que pertenecía ya no existía, porque hacía muchos años que no ejercía ya que antes de ser delegado de la Generalitat había sido concejal en el Ayuntamiento de Barcelona.

Como que además su sueldo era sensiblemente inferior a su remuneración anterior, Cuervo se puso de acuerdo con Varela para cobrar también de la fundación, ocultando esta situación al ICS, para que la mayor parte de su retribución correspondiera a las arcas públicas. «Algo que se podría haber resuelto mediante la contratación pura y simple de Cuervo por el Sant Pau, con excedencia en la función pública, se materializó en un ardid encaminado a mantener a Cuervo en la administración», sostiene el fiscal. 0