El desafío independentista

Puigdemont ficha a Ada Colau para la cumbre del referéndum

Collboni, socio de BComú, pide que no comprometa al Ayuntamiento. La alcaldesa también leyó ayer el manifiesto de apoyo a Carme Forcadell

Colau también participó en la manifestación soberanista de la Diada
Colau también participó en la manifestación soberanista de la Diadalarazon

Collboni, socio de BComú, pide que no comprometa al Ayuntamiento. La alcaldesa también leyó ayer el manifiesto de apoyo a Carme Forcadell.

Carles Puigdemont y Ada Colau llegaron hace tiempo a la conclusión de que se convienen. Lejos de la lógica de poder y contrapoder que caracterizó la cohabitación de Jordi Pujol y Pasqual Maragall, Puigdemont y Colau intercambian favores para aliviar sus precarias mayorías. En este contexto hay que entender la decisión comunicada ayer por la alcaldesa de Barcelona de acudir a la cumbre del referéndum que el presidente de la Generalitat ha convocado en el Parlament el próximo viernes, 23 de diciembre.

Puigdemont se ha encargado personalmente de convencer a Colau para que acuda a su llamada, consciente de que su presencia es mucho más valiosa que la del líder parlamentario de Catalunya Sí que es Pot, Lluís Rabell, quien ya confirmó su asistencia a la reunión.

La alcaldesa sólo puso un inconveniente para aceptar la invitación y fue la hora. La cumbre estaba prevista inicialmente para la mañana del viernes, cuando hay convocado un importante pleno en el Ayuntamiento de Barcelona, ya que deben abordarse los presupuestos municipales. Puigdemont no puso problema y decidió reprogramar su cumbre por la tarde para permitir a Colau acudir a ambas citas.

Tras conocer la confirmación de la alcaldesa, el socio de gobierno de Colau en el Ayuntamiento, Jaume Collboni, se apresuró a lanzar una advertencia: «Tiene todo el derecho a asistir en representación de su formación, si así lo decide, pero que no comprometa a la ciudad ni a los ciudadanos de Barcelona».

Desde que tomó el control del Ayuntamiento de Barcelona, Colau ha realizado numerosos gestos de complicidad con el soberanismo. Acudió, por ejemplo, a la manifestación de la Diada convocada por las entidades independentistas. También se personó a las puertas del Parlament para participar en el acto de apoyo a Carme Forcadell cuando conoció la querella por ignorar al TC y permitir el debate y votación de las conclusiones de la comisión del proceso constituyente. En esta misma línea, Colau también se prestó ayer a leer en la plaza Sant Jaume el manifiesto de apoyo a la presidenta del Parlament. La alcaldesa confía en que todos estos gestos obliguen a ERC a replantearse su voto en los presupuestos municipales.