Reus, pionero en vetar el velo integral en la vía pública

La presencia del burka o del velo integral en las calles o en equipamientos municipales siempre ha sido motivo de polémica en muchos municipios catalanes, incluyendo Barcelona. Han sido numerosas las poblaciones que han vetado la presencia del burka en los edificios pertenecientes al Ayuntamiento. Sin embargo, Reus ha ido más lejos y ha prohibido el velo integral en la calle, un debate que se ha instalado en Francia desde hace años.

El Consistorio de Reus anunció ayer que prohibirá vestir velo integral en la calle –hasta ahora, vetaba el burKa y el niqab en dependencias municipales– según se contempla en las nuevas ordenanzas de civismo, que también prohíben, entre otras cosas, el nudismo y endurecen las sanciones, informó el Ayuntamiento.

Estas nuevas ordenanzas se aprobarán en el pleno del próximo 28 de febrero y prohíben vestir velo integral en la vía pública, en los locales que ofrezcan servicios municipales y en los autobuses gestionados por el Ayuntamiento, bajo multa de 750 euros.

En su parte dispositiva, anuncian que se fijan «las sanciones con los topes máximos que permite la normativa» y «esta contundencia no se reflejará únicamente en el texto, sino también en su aplicación, con la voluntad política de imponer las sanciones con el importe máximo permitido». Así, las infracciones leves tendrán sanciones de hasta 750 euros, las graves, 1.500 euros y las muy graves, hasta 3.000 euros.

El uso del burka y del velo integral siempre ha sido objeto de polémica en los municipios catalanes con mayor índice de población inmigrante, como Reus, Vic, Manlleu o Salt, entre muchos otros. Se trata de un asunto que los Mossos d'Esquadra siempre han seguido de cerca.

Lo demuestra el hecho de que el verano pasado se supo que los Mossos d'Esquadra realizaron un seguimiento exhaustivo de la presencia de burkas y velos integrales en Cataluña, al considerar que son indicadores de la expansión del salafismo, una de las corrientes más radicales del islamismo. El objetivo de la Policía Autonómica era censar la cifra de mujeres que visten este tipo de prendas, pero se trata de un cálculo muy complicado.

En lo referente al velo integral, el Ayuntamiento de Tarragona ya prohibió su uso en equipamientos municipales en 2010, pero no en la vía pública. Como en muchos otros municipios, el burka también quedó vetado en dependencias del Consistorio. La misma decisión tomó Barcelona, bajo las órdenes de Jordi Hereu.

Por otra parte, y por primera vez en Reus, se prohíben «todo tipo de actos sexuales u obscenos en la vía pública» y «tener, ofrecer o pedir servicios sexuales retribuidos» bajo multa de 1.500 euros.