Política

Transporte por carretera

Una cuarta parte de los fallecidos en la carretera son motoristas

Interior inicia una campaña para intentar frenar un porcentaje que se arrastra desde 2010

Un joven de 18 ha sufrido un accidente en Sangonera la Verde
Un joven de 18 ha sufrido un accidente en Sangonera la Verdelarazon

Después de años de descenso en el balance de fallecidos por accidente de tráfico en las carreteras catalanas, los resultados de 2018 no están siendo nada positivos, sino todo lo contrario.

Después de años de descenso en el balance de fallecidos por accidente de tráfico en las carreteras catalanas, los resultados de 2018 no están siendo nada positivos, sino todo lo contrario. Lo mismo sucedió en 2017. En total son, de momento, 178 muertos, por 166 en el anterior ejercicio, un incremento del 8 por ciento. El punto negro siendo el mismo, los motoristas, que representan una cuarta parte de las víctimas mortales.

Por este motivo, el conseller de Interior, Miquel Buch, además de comunicar estos datos, presentó ayer una campaña consistente en cinco anuncios publicitarios para frenar el número de motoristas muertos, que en este 2018 han sido hasta la fecha 39 y que en 2017 fueron 45, unas cifras que siguen «estancadas» desde el año 2010, lo que significa que no se reducen. Según los datos aportados por Buch, 33 de los motoristas fallecidos en este 2018 eran varones, mientras que seis eran mujeres, y el 74 por ciento de quienes han perdido la vida tenían entre 35 y 64 años.

Asimismo, el 56,4 por ciento de los accidentes se produjeron en días festivos y en el 46 por ciento de los casos el suceso se produjo sin la implicación de otro vehículo. Buch señaló que las vías catalanas en las que hay más accidentes de motoristas son la C–31, la N–II, la B–10, la B–20 y la C–32.

Por otra parte, indicó que los tres factores principales que comportan estos accidentes son las infracciones de las normas de circulación, los errores de los conductores y una velocidad inadecuada.

La citada campaña, detalló, consistirá en cinco espacios publicitarios que se emitirán en televisión, de unos 40 segundos cada uno, en los que los protagonistas son menores de edad en sus casas y donde una voz en off hace una analogía con diversas situaciones en las que los motoristas sufren accidentes de tráfico.

Estas son: un motorista que va a velocidad excesiva y un vehículo de cuatro ruedas cuyo conductor habla por teléfono móvil; un conductor ebrio que provoca un accidente; una motorista que no va suficientemente equipada; dos conductores que se saltan un semáforo en rojo; y un motorista que arriesga adelantando coches.

Todos estas circunstancias están basadas en episodios reales de víctimas de tráfico en las carreteras catalanas y buscan que los conductores tengan «el máximo cuidado» cuando manejen el volante.

Buch recordó que «todo el mundo comete errores cuando conduce, pero quien más pierde es quien va en moto», y añadió que esta campaña publicitaria no busca «criminalizar a los motoristas, ni mucho menos», sino concienciar a los conductores.

Por su parte, el jefe de la división de tráfico de los Mossos, Andreu Gonzàlez, lamentó que «a pesar de todos los esfuerzos, no somos capaces de contener» el número de muertes de este tipo. Según detalló, los motos representan el 3 por ciento de los vehículos que circulan por las carreteras catalanas.