Sanidad
Crecen las urgencias extrahospitalarias por la atención a los mayores de 64 años
La mitad de los ancianos atendidos son trasladados al hospital
La población envejece. La esperanza de vida crece. En 2010 los hombres vivían una media de 79 años y las mujeres, 84. Vivimos más, pero llegar a octogenarios tiene un precio que debe asumir la sanidad pública. Este envejecimiento está comportando un progresivo aumento de la morbilidad (conjunto de enfermedades que puede tener un paciente) asociada a procesos crónicos y degenerativos frecuentemente incapacitantes.
La evolución demográfica origina un aumento de la demanda sanitaria en los servicios de urgencias hospitalarias y extrahospitalarias y la necesidad de desarrollar alternativas de hospitalización convencional.
Según las conclusiones de un estudio redactado por el director del Servicio de Emergencias Sanitarias de Valencia, Manuel González, casi la mitad de las urgencias que se atienden son geriátricas (mayores de 64 años) y de estos, la mitad fueron trasladados a hospitales, 84 al día.
El informe, fruto de la tesis doctoral Sobresaliente Cum Laude que presentó en el año 2010, confirma que el número de urgencias extrahospitalarias en Valencia se ha incrementado desde 1995 principalmente por el incremento en la atención a los mayores de 64 años. Así, en doce años y hasta 2007, aumentaron un 6,8 por ciento.
Asimismo, el catorce por ciento de la población de la provincia de Valencia mayor de 64 años fue atendida por el servicio de emergencias a lo largo del año frente al 3,1 por ciento de la población menor de 65 años.
Sin embargo, a partir de 2007, se observó un descenso en el número de emergencias sanitarias (atendidas por Samu), explicable por el incremento de nuevos recursos (SVB, que aparecen en 2003), por una mayor optimización de la gestión del CICU y por una mayor adecuación de la atención urgente desde Atención Primaria (centros sanitarios integrados).
Así pues, la Conselleria de Sanidad concluye que con la aportación de nuevos recursos de emergencias se ha obtenido «una mayor coherencia entre el tipo de recursos asistencial y la patología atendida».
De este modo, en el año 2004 el CICU de Valencia gestionó 379.000 llamadas, se realizaron 37.500 emergencias sanitarias, mientras que en 2010 esta cifra se sitúa en 402.000 llamadas, y cerca de 32.000 emergencias sanitarias.
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