David Tejera: «Hay que reconocer a la felicidad»

-¿Qué va a encontrar el lector en estos «Seis peces azules» (Algaida), ganadora del XLIV Premio de Novela Ateneo de Sevilla?

– Una ventana inmensa al mundo, una forma de marcharse a lugares remotos para vivir aventuras persiguiendo piedras preciosas, tesoros imposibles, buques mercantes... Pero incluso más importantes que esos lugares y esos aromas, también encontrará a una serie de personajes llenos de luces y sombras se enfrentan a sí mismos y se juegan todo por ser felices.

– Asegura que su intención es provocar el lector, ¿Cómo va a removernos por dentro?

– «Seis peces azules» empieza con una invitación a emprender un viaje. Eso es lo primero que debe decidir el lector, si acepta o no. Y si lo hace creo que acabará asomándose a las profundidades de Andreas, de Elka, del Hombre Azul...

– ¿Por qué seis protagonistas?

– Salió así. Seis peces, seis personajes. Tres tramas que se van entrelazando capítulo a capítulo como si fuera una tela de araña.

– ¿Cómo ha ahondado en el tráfico de joyas?

– Yo conocí a uno de esos traficantes, un holandés. Él me habló de algunas cosas sin saber que escribiría de ello. Pero hay que dejar claro que esto tampoco es una novela sobre el tráfico de piedras preciosas.

– Tras una historia que no deja indiferente resulta que lo único que buscan los personajes es la felicidad. ¿Hay que pelear tanto por alcanzarla?

– Y «ay» de aquel que no pelee por ello. Claro que hay que pelear, los personajes lo hacen y nosotros también. Y el camino puede ser apasionante y muy complicado. Pero tan importante como perseguirla es saber reconocerla, valorarla y cuidarla.

– La comparan con las aventuras de Robinson Crusoe o Moby Dick. ¿Qué siente?

– Un honor inmenso. Son títulos de literatura con mayúsculas. Si mi novela recuerda el aroma de esas obras que para mí son sagradas, sólo puedo dar las gracias.