Valencia

Devoción, respeto y alegría para completar el manto de la Mare de Deú

Más de 100.000 falleros y falleras pasaron a los pies de la «Geperudeta» para entregarle sus ramos en uno de los días más emotivos de estas fiestas. La Nit del Foc puso el colofón a una jornada mágica

Habrá que esperar a años venideros para que se repita esta escena
Habrá que esperar a años venideros para que se repita esta escenalarazon

Más de 100.000 falleros y falleras pasaron a los pies de la «Geperudeta» para entregarle sus ramos en uno de los días más emotivos de estas fiestas. La Nit del Foc puso el colofón a una jornada mágica

Por segundo día consecutivo, el respeto y el fervor colmaron las calles de Valencia. La Ofrenda floral a la Virgen de los Desamparados terminó con números de récord. Más de 100.000 personas desfilaron bajo la Mare de Déu y decenas de miles de ramos fueron entregados en su honor.

Los falleros se vistieron con sus mejores indumentarias para llenar de color y emoción la víspera de San José. Se especulaba que ayer sería el día más importante de las actuales fiestas, y las apuestas acertaron. Por la mañana se celebraron los tradicionales homenajes a los célebres artistas velencianos Maximiliano Thous y a José Serrano; a mediodía, la mascletà de Pirotecnia Valenciana se llevó el récord de asistencia de este año, y desde primera hora de la tarde, decenas de miles de falleros, acompañados de sus bandas de música, vistieron primero las calles y luego el manto de la Virgen con bellos colores y frescos aromas primaverales.

Fueron precisamente los grupos musicales quienes añadieron al espectáculo visual y olfativo la guinda auditiva. Cientos de bandas y «xarangas» llevan amenizando desde el inicio de las Fallas todos y cada uno de los rincones de la ciudad.

Sin la música, la fiesta josefina sería totalmente diferente. Pese a la petición de la Junta Central Fallera de interpretar otro pasodoble diferente a la famosa marcha «Valencia» durante la entrada en la Plaza de la Virgen, continuó siendo esta la melodía predominante durante las jornadas de ayer y el sábado.

Ayer, además, se pudo vislumbrar ya claramente el diseño del manto floral de la «Geperudeta», que este año representa el tradicional traje de espolín, la indumentaria típica valenciana confeccionada artesanalmente con seda. Los colores ya eran conocidos: predominio de blanco y rojo, detalles en amarillo y rosa.

Las estampas que dejan ambos días de desfile son clásicas pero emocionantes año tras año: miradas que hablan solas, lágrimas que piden, ofrecen y recuerdan. Sonrisas que estallan después de meses de espera, pasos que ralentizan su marcha para disfrutar de unos segundos más a solas con la «Mareta», besos al aire en memoria de los que no están.

El culmen de tal explosión de emotividad llegó con la entrada de la Fallera Mayor de Valencia. Rocío Gil pisó el mármol granate de la Plaza de la Catedral con un considerable retraso, tal y como es habitual durante la segunda jornada de la Ofrenda. Visiblemente emocionada y colmada de alegría, entregó su ramo y visitó la Basílica. A su salida, la Banda Municipal de Valencia interpretó el Himno Regional Valenciano. Después, como es tradición, asistió a la Nit del Foc, disparada en plena madrugada por Reyes Martí en honor a la Fallera Mayor.

Antes de su memorable entrada nocturna a la Plaza de la Virgen, cientos de comisiones desfilaron por las céntricas calles de la capital del Turia. Retomaron el relevo del día anterior las fallas del sector Botànic-La Petxina y Rascanya. Continuaron Quart de Poblet-Xirivella, Camins al Grau, Jesús, Mislata, Ruzafa, La Creu Coberta, Pla del Reial-Benimaclet, El Pilar-Sant Francesc,Cabanyal-Grao-Nazaret, La Seu-El Mercat y el céntrico sector de La Xerea.

A continuación entraron en la plaza las Casas Regionales y la Falla de la Plaza de la Merced, de donde procede la Fallera Mayor de Valencia, que entró a continuación, acompañada por toda su Corte de Honor.

Después del día más emocionante y la noche más larga para los falleros, toca afrontar el día de San José. La última mascletà del año correrá a cargo nuevamente de Reyes Martí, quien también lanzará el castillo pirotécnico previo a las cremàs de las fallas municipales. Será esta la mecha que prenda la destrucción definitiva de las Fallas 2018 y abra la puerta a la edición de 2019.

Recta final

Valencia enfila la recta final de las Fallas con una ocupación hotelera que roza el lleno y un clima típico de estas fiestas, que alterna sol con viento y ligeros chaparrones, y consciente de que todavía le quedan menos de veinticuatro horas trepidantes de emoción, pólvora y fuego.

Después de tres días de intensa actividad, turistas, visitantes y especialmente falleros empiezan a evidenciar síntomas de cansancio, con afonía y ojeras que, sin embargo, no les hicieron desfallecer ante el segundo día de la Ofrenda, la noche pirotécnica de la Nit del Foc y, ya hoy, la Cremà del día de San José. Pero la fiesta también ha vivido su cruz porque la semana fallera comenzó con la muerte de un pirotécnico en la explosión de una caseta cuanto manipulaba material y dejó algunos incidentes por el viento.